Celebración operística

A.D.
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El Teatro Circo se suma hoy, a las 12 horas, a la conmemoración del Día Mundial con un concierto de Helena Gallardo y Gabriel Blanco, respaldados por la Banda Sinfónica Municipal

Helana Gallardo y Gabriel Blanco. - Foto: Rubén Serrallé

El Teatro Circo se suma hoy, a las 12 horas, a la conmemoración del Día Mundial de la Ópera y lo hace de la mano de la Banda Sinfónica Municipal de Albacete, dirigida por su titular, Miguel Vidagany Gil, y dos intérpretes de lujo, la soprano Helena Gallardo y el tenor albacetense Gabriel Blanco.

Para esta cita, Pasión por la ópera, han elegido arias, dúos y oberturas de dos de las óperas más representadas, La Traviata y Tosca, como homenaje a dos de los más grandes compositores del género, Verdi y Puccini.

Gabriel Blanco comentó  a La Tribuna de Albacete que  «teníamos  que conmemorar el Día Mundial que cantando ópera y lo que haremos junto a la Banda Sinfónica Municipal de Albacete, Helena Gallardo y yo, con un recital muy peculiar  además, porque es un concierto donde la base son dos grandes dúos operísticos, de Tosca, de Puccini y de La Traviata, de Verdi, bastante largos, escenas en las que, evidentemente, hay mucha acción dramática, con lo cual, aunque no hay decorados, sí se podrá ver una cierta escenificación».

Helena Gallardo destacó que la elección de Verdi y Puccini se hace «porque son dos de los más grandes exponentes de la ópera, aunque hay otros compositores maravillosos, como Mozart, Bellini, Donizetti o Rossini, pero ambos son, digamos, más actuales, nos tocan más el corazón, La Traviata es el paso del bel canto al verismo y Tosca  ya es verismo y por eso queríamos cantar esto, con esta banda sinfónica que suena de maravilla, para que al público no solo le llegue al oído, también al corazón, que la gente se emocione con la historia, lo sienta y lo viva». 

El público, apuntó Gabriel Blanco, está acostumbrado a ambos compositores y  «te diría que Verdi es el padre de la ópera decimonónica, cuando llega al máximo desarrollo el género y es también el padre, quizá de la ópera más representada de la historia, La Traviata, acaso de la que más funciones se hacen al año en todo el mundo y, luego Puccini, es verdad que sus melodías están presentes en muchos ámbitos, como el Adiós a la vida, de Tosca, que oiremos en el concierto, pero es que es el inventor del lenguaje que utilizan hoy en día los compositores de bandas sonoras».

Vocalmente, dijo Helena Gallardo, las óperas de Verdi y Puccini, son técnicamente muy exigentes y «tienen una belleza impresionante, que nos gusta, porque somos cantantes de retos, amamos ambos a estos compositores y, además de cantar desde el corazón, somos atletas, nos gusta hacer cosas virtuosas y entregárselas al público de manera que parezca todo sencillo, para que solo tenga que disfrutar».

Subrayó Gabriel Blanco que «estamos muy contentos, hemos ensayado con la Banda Sinfónica Municipal estos días y han hecho un trabajo maravilloso, porque este material es para orquesta, pero la  banda ha tenido un reto grandísimo que ha superado con creces, los arreglos son maravillosos, se refleja todo el color orquestal, la esencia» y como destacaba Helena Gallardo, «ha sido mágico, de verdad».

Ambos están celebrando este reencuentro con el público, «por todo lo alto, porque tenemos un intenso programa de actuaciones, hay una gran efervescencia», remarcó  el tenor  albacetense.