Considerada por mérito propio como una de las orquestas más importante del mundo, la Berliner Philharmoniker (BPhil) es mucho más que una orquesta sinfónica, es toda institución musical fundada en 1882, por donde han pasado los mejores directores y solistas del panorama internacional, ahora, desde 2002, con forma jurídica de fundación pública, dependiente del estado federado (land) de Berlín, con fondos del gobierno municipal de Berlín y con el Deustche Bank como principal patrocinador.
Cuando decido dedicar La Tribuna Musical en este primero de mayo a la Filarmónica de Berlín, una de las cosas que más me llaman la atención, sensibles como estamos todos a la terrible actualidad bélica tras los 66 diabólicos días que llevamos con el alma en vilo desde la invasión de Putin a Ucrania, es que todos los primeros de mayo la Filarmónica de Berlín actúa en un auditorio o teatro característico de una ciudad europea diferente para celebrar su aniversario, en el marco de un programa llamado Europakonzert. Por primera vez, en 1991, se celebró en la Sala Smetana de Praga bajo la dirección de Claudio Abbado, con música de Mozart, desde entonces, transmitido en directo por Eurovisión, el concierto conmemorativo ha sido dirigido por diferentes directores invitados. El segundo año del programa, el concierto se celebró en España, en la Basílica de El Escorial (1992), dirigido por Daniel Barenboim. La BPhil regresó a España en 2011 bajo la dirección de Rattle para actuar en el Teatro Real de Madrid, y, aunque estaba previsto que la edición de 2021 tuviese lugar en la Basílica de la Sagrada Familia de Barcelona, finalmente se celebró en su sede de Berlín, un edificio descomunal cuyo auditorio es un verdadero ingenio (podemos verlo en la foto principal de esta página), ideado por el arquitecto expresionista Bernhard Hans Henry Scharoun (1893, Bremen-1972, Berlín). En 2012 el concierto de primero de mayo se celebró en la Escuela Española de Equitación de Viena, bajo la dirección de Gustavo Dudamel, y en 2013 su sede fue, por tercera vez, Praga. El actual titular, Kirill Petrenko tenía programado dirigir por primera vez el Europakonzert en 2020, en Tel Aviv, pero el concierto se tuvo que suspender debido a las medidas de protección por la pandemia de coronavirus, sustituyéndose por un concierto de cámara en la BPhil, a puerta cerrada, retransmitido por televisión. Y hoy estaba previsto en el Teatro de Ópera y Ballet de la ciudad ucraniana de Odesa, pero, por razones obvias, a principios de abril se anunció el cambio para celebrarlo en el Great Amber Concert Hall en Liep?ja (Letonia), en «una muestra de solidaridad hacia la población de Odesa y Ucrania y un gesto por la coexistencia pacífica en Europa» -según palabras de la propia BPhil-.
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