La competición está llegando a su fin y todo está apretado por abajo. E Albacete lleva seis jornadas sin perder, pero lleva muchos empates y con eso solo puede estar un punto por encima del descenso, lo que le obliga a sumar ya de una vez tres puntos de una tacada si quiere que la soga deje de apretar en su cuello. El tiempo se acaba, la presión aumenta y al equipo de Lucas Alcaraz no le queda otra que ganar hoy al Sporting de Gijón en el Belmonte.

Otra vez el calor será protagonista, lo mismo que la necesidad de sumar tres puntos. No hacerlo puede significar caer al descenso, con una jornada menos y quedado nueve puntos por disputarse. El Sporting llega con 50 puntos y viendo como está la cosa no puede despistarse, pero tiene tiempo para arañar esos puntos que supuestamente le asegurarían la permanencia, mientras que el Alba está bastante más lejos, con 45.

Las rotaciones volverán a estar muy presentes y eso abre un sinfín de posibilidades para un equipo que está compitiendo y peleando, pero al que la falta de gol le está condenando a sufrir demasiado. El Alba ha podido certificar su permanencia a poco que hubiera acertado en varios partidos que empató y bien pudo ganar, como el último disputado en Málaga.

Gorosito seguirá sin entrar, ya que su recuperación va bien pero el técnico prefiere esperar al partido del próximo lunes en Elche. Alberto Benito sigue de baja, así que  esta vez lo normal es que juegue Caro, con Arroyo y Kecojevic en el centro y, supuestamente, entre Caballo en la izquierda. Azamoum ya está recuperado, pero lo normal es que empiece en el banquillo, mientras que arriba veremos quién repite y quién entra nuevo. Jueguen los que jueguen, la idea está clara, ganar y dar un paso al frente hacia la permanencia, teniendo claro la dificultad que entraña que los próximos rivales sean Elche y Zaragoza, ya que el Cádiz, en la última jornada, ya deberá estar ascendido.

(Más información en la edición impresa)