Fran Noguerol es una institución en el Albacete. El carácter del orensano ya caló en sus dos primeras temporadas como jugador, en Segunda División, entre el 2006 y el 2008. En el 2011 regresó para ser el capitán en la lucha por recuperar el fútbol profesional, lo que se consiguió en el 2014 y tras la temporada siguiente en Segunda, con 38 años, decidió colgar las botas para pasar a los banquillos. Ha sido entrenador del filial en varias ocasiones y ha ocupado diversos puestos dentro del staff técnico del club, muchas veces dentro del primer equipo, del que se ha tenido que hacer cargo ya fuera de forma provisional o incluso, como la última vez, para acabar una temporada desastrosa en la que el equipo descendió. "Fueron sólo cinco partidos y no sé que habría pasado si entra ese penalti de Lugo", recordó en su despedida.

El orensano estuvo arropado en su despedida por los dos embajadores del club, Juanito y Antonio López Alfaro. También una decena de jugadores de la plantilla quisieron acompañarlo en este momento en el que no faltó la emoción e incluso alguna lágrima, aporque "siempre me he sentido muy querido aquí, en la ciudad y en el club. Albacete es mi ciudad, tengo 46 años y he pasado aquí 13, un tercio de mi vida, así que estoy ligado a Albacete para siempre, porque es la ciudad en la que mejor he estado y, sin dejar de ser gallego, me siento muy de aquí".

De su marcha, primero agradeció que Rubén Albés le hubiera echo hueco para estar dentro del cuerpo técnico y "justo después recibo la llamada de Rubén de la Barrera, que si quiero formar parte de su staff técnico y tras pensarlo durante 24 horas decido aceptar, porque consideré que era una oportunidad para crecer profesionalmente. De momento toca esperar a que surga un nuevo proyecto, pero así es el fútbol".