Desde hace años, venimos observando la necesidad de atajar un problema de salud pública como es la obesidad. Sobre todo porque no ha dejado de crecer en los últimos veinte años según reflejan los principales informes en la materia. Ahora mismo, según el Observatorio de la Actividad Física de Castilla-La Mancha (OBAFI), el 11,38% de los menores en edad escolar presentan obesidad, el 20,75% sobrepeso y el 65,49% normopeso. La obesidad tiene un origen multicausal en el que intervienen factores genéticos, biológicos, psicosociales, de estilo de vida, sociodemográficos y ambientales. Teniendo en cuenta que la infancia es la etapa que más influye en el desarrollo físico, mental y social, es necesario tomar medidas en edades tempranas. Según el último dato disponible para España del estudio 'Alimentación, Actividad física, Desarrollo Infantil y Obesidad' (ALADINO), 4 de cada 10 menores tiene exceso de peso en nuestro país. Datos que se han agravado con la pandemia, pero que vienen de atrás. Y es que este informe apunta a las desigualdades económicas como uno de los factores determinantes, ya que el porcentaje de niños y niñas con obesidad se duplica y llega hasta el 23,7% para los hogares con menos ingresos, siendo mucho más frecuente la obesidad y el sobrepeso. La frecuencia de obesidad es mayor en entornos familiares con ingresos inferiores a 18.000 euros anuales. En cuanto al estilo de vida, múltiples factores determinan la tendencia a tener sobrepeso. Por ejemplo, la falta de sueño. Y es que no dormir las horas recomendadas duplica el riesgo de obesidad. También, como resulta evidente, los hábitos alimentarios. Si nos quedamos en el informe ALADINO observamos que un 82% de las familias encuestadas apuntaron que incluyen solo leche en el desayuno; galletas, en un 57,5% de los casos; 45,2% cereales; y solo un 20,1% fruta fresca. Igual de importante que la alimentación, es la práctica de actividad física. En  este caso, el género resulta determinante, puesto que los datos reflejan que los chicos tienen más actividad que las chicas.

Promover hábitos saludables

El Ejecutivo de Castilla-La Mancha viene desarrollando una estrategia para la prevención del sedentarismo y la obesidad. De hecho, destaca el director  general de Juventud y Deportes, Carlos Yuste, que los datos que aporta la OBAFI «corroboran la efectividad de los programas» con un alto porcentaje de menores con un peso normal.El programa Somos deporte 3-18 constituye uno de los pilares fundamentales de actuación, con más de 94.000 escolares inscritos en sus diferentes líneas de actuación. Además el Gobierno regional va a poner en marcha el Plan de prescripción de la actividad y el ejercicio físico, más conocido como plan para la implantación de la 'Receta deportiva', en 64 localidades. Y es que es importante seguir recuperando la actividad tras las dos problemáticas que dejó la pandemia según Yuste: «la disminución de la cantidad de actividad física» y también «la modificación de patrones alimentarios, sobre todo en el confinamiento, con mayor consumo de procesados y bebidas azucaradas». La nuevas prácticas como el CrossFit también se suman en la etapa escolar con el CrosEF, un programa de ejercicios funcionales mediante el entrenamiento interválico de alta intensidad. Todas estas prácticas con el objetivo de alcanzar una salud plena en la sociedad. 

El 80% de los menores que tienen obesidad, también la tendrán en la adultez, siendo un factor de riesgo para enfermedades cardiovasculares y el cáncer - Foto: David Pérez

Obesidad en cifras

El 18,5% de los menores con obesidad pertenecen a familias con  ingresos inferiores a 18.000 euros anuales. Además el 69,1% de los progenitores de escolares con exceso de peso, considera que el peso de sus hijos es normal. En cuanto a la actividad, el 57,5% practican actividad física organizadas o dirigidas por un/una monitora. El porcentaje es mayor en el caso de los chicos, llegando al 60,2%, mientras que en las chicas se queda en un 54,5%. Si observamos la alimentación, el 20,1% desayuna fruta fresca, siendo España el país de la UE en el que menos menores consumen vegetales y frutas diarias.

Excesivo uso de las pantallas

Los informes apuntan al uso de las pantallas como un factor determinante para generar una población infantil mucho más sedentaria. El 94,8% tienen teléfono móvil, el 58% duerme con el móvil en la habitación y el 21% se conecta a partir de medianoche todos o casi todos los días. No acaba aquí la cosa, el 31% pasa más de cinco horas conectado a internet de manera diaria, cifra que aumenta al 49,6% durante los fines de semana.