El Barómetro Empresarial de la Provincia de Albacete 2020-21 elaborado por FEDA ofrece un análisis exhaustivo y pormenorizado de los efectos de la crisis económica derivada de la pandemia, una radiografía precisa de su incidencia en el tejido empresarial albacetense. En ese sentido, el presidente de la Confederación de Empresarios, Artemio Pérez, destacaba que la provincia resistió mejor el envite del Covid-19 y subrayó que mientras la caída del PIB provincial es de un 7,4%, la renta nacional cayó un 11 por ciento, según la estimación del Banco de España.
En cuanto a los resultados del informe, valoró la fiabilidad del mismo, ya que se realizó en base a las respuestas de medio millar de empresas consultadas, en su mayoría pymes y autónomos. «Nuestro Barómetro está muchísimo más cerca de la realidad de lo que ha ocurrido y lo que puede ocurrir en la provincia que otros informes de centros de análisis a nivel nacional», apuntó Pérez.
Por su parte, el secretario general de FEDA, Vicente García, expuso las principales conclusiones reflejadas en el estudio, comenzando con una reducción de la facturación del -16,5%, con un impacto directo en el empleo del -7,2%. En términos absolutos, la pérdida de la facturación de autónomos y pymes de la provincia se estima en 740 millones de euros
García argumentó que las razones de la menor caída de los resultados empresariales en Albacete se explicaría por el mayor peso del sector primario en la provincia (un 10% de la actividad productiva por el 2,8% a nivel nacional), la menor dependencia del turismo, comercio y hostelería que tienen otras regiones o provincias limítrofes, ya que en Albacete representa un 20% y a nivel nacional se sitúa en torno al 25%, y la importancia que tiene aquí la Administración y el sector de la educación (un 25%, cinco puntos más que la media nacional), porque el sector público mantuvo sus presupuestos, cuando no los aumentó, con diferentes planes de ayuda e inversión.
Por sectores de actividad, la caída de las cifras de negocio fueron muy desiguales, siendo la hostelería el sector más afectado en ese sentido, en torno a un 45% de bajada, seguida de otros servicios, con un descenso del -24,8%, transportes, donde la caída fue del -23,5%, comercio (-19%), metal (-14,3%), industria (-13,9%) y construcción (-6,8%), debiendo subrayarse que agricultura y ganadería es la única área de actividad económica que logro aumentar la facturación en 1,1% (alrededor de nueve millones de euros de incremento).
En cuanto a volumen bruto de pérdidas, nuevamente la hostelería encabeza el ranking con una caída de 196 millones de euros, seguida por comercio (-175 millones), industria (que dejó de facturar 162 millones), otros sectores (-100), transportes (con pérdidas de 62,7 millones), metal (42-1) y construcción (-11).
«El reparto de la incidencia de la crisis es muy desigual, pero estas cifras son lo suficientemente elevadas como para valorar la necesidad de apoyos a prácticamente todos los sectores», consideraba el secretario de FEDA.
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