Las comunidades de vecinos que comparten caldera de gasóleo o gas ya se están planteando reducir las horas de calefacción al día y también el periodo de desconexión. Aunque cierto es que cada vez son más numerosas las viviendas que disponen de calefacción individual, las comunidades de vecinos que cuentan con caldera comunitaria tienen programado el suministro entre el 1 de noviembre y el 30 de abril, aunque el incremento del precio de los carburantes y del gas está provocando que muchas fincas y urbanizaciones ya estén consultando a sus administradores las medidas a tomar para restringir los periodos y las horas de conexión.

El presidente del Colegio Oficial de Administradores de Fincas de Albacete y Cuenca, Antonio Fuentes, corrobora el aumento de consultas que se está registrando en los despachos de estos profesionales, después de que el gas haya experimentado «una subida brutal» de casi un 400%, pues «si antes lo compraban a 0,08 ahora está en 0,33 euros», si bien advierte de que estos precios fluctúan cada día y prácticamente cada hora. 

Una oscilación que también interviene en el gasóleo, carburante del que se nutren muchas calderas comunitarias y que ha pasado de adquirirse a 0,46 a 1,32 euros el litro, lo que está condicionando la firma de contratos anuales y que las empresas suministradoras no quieran cerrar un precio concreto ante la inestabilidad de los mercados. «El gas siempre ha sido un recurso más estable, pero con el conflicto entre Rusia y Ucrania está más variable», indica Antonio Fuentes, que subraya que, con las calefacciones individuales, es cada vecino el que ahora determina los consumos.

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