La vicesecretaría Social y de Calidad de Vida del Partido Popular de Albacete, María Gil, ha criticado que "el Gobierno de Sánchez no quiere bajar los impuestos a pesar de la imparable subida de precios de la electricidad, el gas, los carburantes y la alimentación, entre otros, y del sobrecoste que supone para las familias, de 500 euros al año por hogar en la cesta de la compra concretamente, siendo Castilla-La Mancha una de las regiones de España que más ha sufrido el incremento generalizado de precios.
Ante esta situación, María Gil ha exigido a los Gobiernos de Sánchez y Page una bajada de impuestos para que las familias puedan llegar a fin de mes, sobre todo las más vulnerables, teniendo en cuenta que "Castilla-La Mancha es la región más inflacionista de España, con una subida del IPC del 1 por ciento, mientras Albacete lidera la subida del IPC a nivel regional, con una subida del 1,1 por ciento, en el mes de febrero".
Según ha recordado la vicesecretaria, "el Partido Popular apuesta por una bajada de impuestos que alivie la carga que están soportando muchas familias, ya que de alguna manera se están convirtiendo en financiadores desproporcionados del Estado que a cuenta de la inflación sigue haciendo caja". En este sentido, ha señalado que "el Estado ingresa 2.000 millones extra por cada punto que sube la inflación, mientras las familias se desmoronan", según datos de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef).
Además, María Gil ha asegurado que "desde el Partido Popular pensamos que una política económica y fiscal distinta para aligerar las tensiones de precios que estamos viviendo en España es posible si se tuviera voluntad política de ponerla en marcha por parte del triunvirato socialista que nos gobierna en el Estado, en Castilla-La Mancha y en Albacete, con Sánchez, Page y Sáez, y por eso defendemos la bajada de impuestos entre otras muchas medidas, tales como la racionalización del gasto burocrático, el rediseño de los fondos europeos y reformas estructurales a medio plazo".
En opinión de María Gil, "una vez más los gobiernos socialistas dan la espalda a las rentas bajas y medias al no apostar por una bajada de impuestos que permita a muchas personas y familias poder llegar a fin de mes en un país que sigue teniendo el mayor porcentaje de parados de la Unión Europea, con una situación política de inestabilidad que nada ayuda", preguntándose "¿dónde está la bajada de impuestos que anunció Sánchez en la Conferencia de Presidentes en la Isla de la Palma y que además estaba respaldada por el señor Page?".
Concretamente, la vicesecretaria Social y de Calidad de Vida ha mostrado su preocupación por la alarmante subida de precios en el sector de la alimentación, ya que, según el informe que la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) publicó el pasado mes de marzo, afecta a productos básicos de la cesta de la compra como por ejemplo la fruta fresca (3,8%), las legumbres secas o en conserva (3,1%), los alimentos para bebes (5%), la leche entera (1,9%), la leche desnatada (1,6%), el pescado congelado (1,3%), el queso (1,1%), el agua mineral (5,1%) y el pan (1,1%).
Ante esta situación, María Gil ha recordado que el Partido Popular de Paco Núñez está pidiendo una y otra vez en Castilla-La Mancha una bajada generalizada de impuestos para hacer frente a la grave crisis económica que atraviesa nuestra tierra, sobre todo teniendo en cuenta que "en nuestra región es donde más impuestos se pagan, en concreto somos la octava comunidad autónoma con mayor presión fiscal, la cuarta con menor renta por hogar y una con los precios más altos y los salarios más bajos", del mismo modo que lo está haciendo a nivel nacional Alberto Núñez Feijóo, quien ha solicitado recientemente a Sánchez durante la reunión mantenida La Moncloa rebajar el IRPF, con ajustes en todas las escalas para desactivar la inflación, sin que el presidente del Gobierno aceptara ninguna medida.
La vicesecretaria del Partido Popular ha criticado la negativa de los gobiernos socialistas a bajar impuestos, asegurando que "lo que les gusta es recaudar y si es a través de más y más impuestos mejor a pesar del grave deterioro de la solvencia de los hogares españoles".
En opinión de Gil, "es difícil no ver que la pérdida continuada de ingresos y la creciente subida del IPC está suponiendo serias dificultades para las empresas y familias a la hora de afrontar el pago de los suministros del hogar y adquirir alimentos frescos, al margen de que para algunas familias el hecho de acudir a la óptica o al dentista les está resultando un lujo".
La vicesecretaria ha señalado que "frente al temor de la izquierda a bajar impuestos, los gobiernos del Partido Popular como en Andalucía, Madrid, Murcia, Castilla y León y Galicia son gobiernos con un modelo económico que está funcionando, basando en una bajada de impuestos, un incremento en la inversión y en la mejora en los servicios, habiendo conseguido ganar contribuyentes y recaudar más pese a la bajada de impuestos y eso es precisamente lo que pedimos al Gobierno de España y al de Castilla-La Mancha, que apueste por políticas de progreso y bienestar y no de slogan propagandístico".
María Gil ha asegurado que "el PP seguirá trabajando para que acciones cotidianas no se sigan convirtiendo en una carrera de obstáculos para los ciudadanos, teniendo claro que la prioridad es ayudar a las familias, pensionistas, pymes y autónomos para que puedan amortiguar el duro golpe que la subida de alimentos tiene para sus economías, convencidos de que una bajada de impuestos, si hay voluntad política para llevarla a cabo, es posible".