«Balzac fue muy leído por las mujeres de su tiempo»

Antonio Díaz
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El salón de actos de la Diputación acogió una nueva conferencia de Aluex. Ramón Bello Serrano intervino en este ciclo con Balzac, la ebriedad del café.

Ramón Bello Serrano - Foto: José Miguel Esparcia

El salón de actos de la  Diputación acogió  una nueva conferencia de Aluex. Ramón Bello Serrano intervino en este ciclo con Balzac, la ebriedad del café. El abogado, escritor y columnista de La Tribuna de Albacete comentó las singularidades de esta charla.

¿Por qué ese título, a priori tan extraño?

Porque Balzac solía tomar 50 tazas de café al día  para poder escribir de un tirón, lo que luego sería La comedia humana. El café, tomado en altas dosis, puede conducir a cierta ebriedad y desmesura, tal como fue su vida. 

¿Por qué una conferencia sobre Honoré de Balzac?

Por una razón muy personal. Una de las últimas conferencias que dio mi padre, precisamente para Aluex, fue sobre Balzac. Eso a mí me procuró leer toda La comedia humana, como un homenaje  a su memoria y, cuando desde Aluex me propusieron la conferencia, de lo que me sentí muy honrado, quise hacerla así. 

¿Tiene vigencia hoy esa obra La comedia humana?

La comedia humana, además de un clásico, es de una actualidad extraordinaria, por una razón muy sencilla, Balzac es el primer escritor que incluye el dinero como base fundamental de toda su novelística. El dinero como motor de la vida social, de la vida aristocrática, de la burguesía o de los campesinos y cómo el dinero y los procedimientos formales y judiciales van a afectar a la vida de sus personajes.  Hizo lo que nadie había hecho antes, sus personajes aparecen en unas y otras novelas y eso procura una ligazón grande en un proyecto tan desmesurado, que no llegó a acabar. 

¿Por dónde recomienda empezar a leer su obra?

Balzac es como un tren de largo recorrido al que puedes subirte y cualquiera de sus novelas es estupenda; es un mar donde uno conviene dejarse llevar. Por citar alguna, están Las ilusiones perdidas y, por cierto, acaba de estrenarse una película extraordinaria basada en la novela. Tenemos también El coronel Chabert, que nos cuenta todo lo que fue el Imperio y Napoleón, pero fundamentalmente Las ilusiones perdidas ha quedado como la columna vertebral de La comedia humana, junto a Papá Goriot.  

¿Cómo son sus personajes?

La comedia humana tiene 2.000 personajes, algunos fundamentales, como el abogado, médico, cura de aldea, campesino, aristócrata. Todos los personajes presentes en la vida social y personal están desarrollados con una ojo clínico extraordinario, como tenía Balzac y hoy son los mismos personajes. Balzac fue, sobre todo, muy leído por las mujeres de su tiempo, porque las entendía perfectamente y se sentían muy bien tratadas y comprendidas por él. 

Es un escritor de actualidad, además de uno de los grandes de todos los tiempos. 

¿También en ese aspecto fue un adelantado?

Balzac es un novelista totalmente realista. Su novela es clara, un reflejo de la realidad. Vivió la época de los grandes salones, la aristocracia, el Imperio, pero también vivió los padecimientos de la mujer campesina y desfavorecida.  Si no fue un adelantado a su tiempo en cuanto a la defensa de la mujer, sí fue un escritor que la comprendía muy bien. La mujer, que estaba apartada, encorsetada, se sintió muy comprendida y tratada en toda la literatura de  Honoré de Balzac.  

Balzac tiene mucho que ver con su última novela, La acción de regreso. 

Sí, La acción de regreso es un homenaje a todos sus personajes. Efectivamente, más o menos disfrazados, son personajes de La comedia humana, con muchos guiños, porque lo más importante de mi novela es el dinero y todos los procedimientos judiciales, de Derecho,  con abogados y procuradores.   

¿Prepara un nuevo proyecto literario?

Siempre tengo algo en cartera. Están pendientes de publicar dos ensayos literarios y ya estoy trabajando en otra novela, pro ya veremos porque escribir una novela es muy complicado. Admiro mucho a los compañeros que tienen esa facilidad. 

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