La Sección Segunda de la Audiencia Provincial ha condenado a un año y ocho meses de cárcel a los cuatro temporeros que fueron juzgados por las revueltas en la IFAB, en agosto del año pasado, donde debían guardar confinamiento.
Además, deberán abonar una multa de unos 800 euros e indemnizar de manera conjunta a un policía nacional en 350 euros por las lesiones leves que sufrió.
La sentencia, contra la que cabe recurso en el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, considera probado que los cuatro acusados tuvieron que ver con las revueltas en el confinamiento y con las amenazas que, con cuchillos o lanzando baldosas, profirieron a los agentes de la Policía Nacional.
La sentencia detalla que se acuerda que los cuatro acusados cumplan la mitad de la pena impuesta, siendo sustituida la restante por su expulsión de territorio nacional, no pudiendo regresar a España en un periodo de seis años.