El Carnaval se despidió en Albacete  y todo regresa a su orden natural, con el comienzo de la Cuaresma. Tras un año en blanco por la pandemia, la capital retomó con más ganas la actividad carnavalera y tras las pasadas jornadas de pregón y el vistoso desfile, llegó la despedida de la fiesta.

El velatorio de Doña Sardina se llevó a cabo en la Plaza de Benjamín Palencia, con degustación de las populares pulgas de sardina, para dar paso al ritual del cortejo y quema de la sardina, amenizado por las charangas de Parque Sur y Los Calamidades.

Tras el velatorio, partió el nutrido cortejo hasta la Plaza de Gabriel Lodares, Punta del Parque, donde, en presencia de numeroso público, se procedió al juicio, sentencia y quema de Doña Sardina, con la solemnidad requerida por parte del obispillo.

Como es habitual, la vistosa escultura fue realizada por la Fundación Asla. Participaron en esta ceremonia Alfonso Asenjo, actor, Don Cenizo y Alto Magistrado; Carmen Cuartero, Perlata Floria, cantante que ofreció buena muestra de su talento, y Pablo Cano, músico, Gargarito Cuaresmón. Como apuntaron en la ceremonia previa a la quema: Bailemos, cantemos, amemos que la vida es breve. La alegría del placer se acaba...

Previamente se entregaron los  e los premios de Carnaval, en un acto que contó con la presencia de miembros de la Corporación, de las distintas formaciones.

El primer premio del concurso por parejas fue para Serpiente, dotado con 200 euros y diploma, mientras que el primer premio individual, de 150 euros y diploma, fue para el disfraz de Vestido Floral.

Este año el primer premio, dotado con 800 euros y diploma, fue a la Asociación de Vecinos de El Pilar por su disfraz Chicas Coloridas. El segundo premio, dotado con 600 euros, fue para la Asociación Cultural El Pincho de la Feria, por su disfraz Picapiedras; mientras que el tercer premio, de 400 euros, recayó en el grupo Skating Dreams, por el disfraz Toy Story.

Se entregaron asimismo los  cuatro accésit de 150 euros, que fueron a Asprona, por su disfraz ambientado en El cine de nuestra vida; a Caporales de San Simón, por su disfraz Danza Típica Boliviana; a la Asociación de Vecinos del barrio Cañicas-Imaginalia, por su disfraz Los lindos mexicanos, y a Pilar Artesanía, por su disfraz Cuentos.