Pedro J. García

Pedro J. García


La demagogia

15/01/2021

Los meses de pandemia por el coronavirus pasan y con cada noticia buena, como la llegada de la vacuna, los ciudadanos nos llenamos de una esperanza reforzada por las palabras de nuestros dirigentes, que nos hacen que miremos al frente en busca de la luz al final del túnel, pero no se divisa, porque esto parece el caminar del cangrejo, con un paso hacia adelante y dos hacia atrás. 
Este pulular, con más retroceso que avance, hace que los sufridos habitantes empecemos a cansarnos de ser los responsables de todo lo malo, como de la tercera ola debido a los efectos de las fiestas navideñas, cuando en verdad esa tercera ola sólo es fruto de unas medidas de dirigentes pusilánimes, ya que faltó testiculina para ser rigurosos y no tener 17 navidades, con sus respectivas medias, en todo el país. Nuestra clase política está instalada en el discurso duradero, pero vacío, donde lo importante es estar muchos minutos ante el micrófono y no lo que se diga, desconocedores de la frase de Baltasar Gracián, «lo bueno, si breve, dos veces bueno».
Estamos ya cansados de demagogia, de ilusionarnos con la vacuna y comprobar que apenas se ponen dosis, de ver que día tras día aumentan los contagios, que las muertes por Covid-19 no cesan, que la pérdida de puestos de trabajo no tiene freno y que contamos con un ministro de Sanidad que está más pendiente de ser presidente de la Generalitat catalana que de hacer bueno el dicho de Gracián.
Tengan ustedes la responsabilidad que piden al ciudadano, porque a más de uno se le están hinchando los ovoides que cubre el escroto.