Elena Serrallé

Elena Serrallé


Unas alas, unos zapatos y un reloj

29/12/2021

Termina el año y toca prepararse para el que comienza, dicen que tiene que ser muy valiente para atreverse a venir tal y como está el panorama. 
Como si de una isla desierta se tratara, ¿qué tres cosas os llevaríais al próximo año?
Yo lo tengo decidido: unas alas, unos zapatos y un reloj.
Con las primeras volaría por encima del miedo, de las mentes mediocres que solo saben escupir basura, volaría alto alejándome de los rincones del odio y desde allí arriba me esforzaría por observar con la perspectiva que te otorga la distancia. Aprendería a relativizar, concediendo y restando importancia. Soltaría el lastre de las malas energías. Me curaría de los comentarios obtusos y las miradas contaminadas. Me sentiría libre.
Me llevaría unos zapatos para ofrecerlos a quien me juzgue con verdades a medias y opiniones envenenadas. Los cedería especialmente a quien, sin conocer mis días, se permita emitir veredictos  huérfanos de información. Los prestaré gustosa a quien quiera calzarlos y caminar a mi lado aun a riesgo de clavar piedras en mis pies desnudos.
Y portaría conmigo un reloj para que me recuerde a cada instante la muerte de los minutos, lo valioso que es el tiempo. Lo consultaría para no perder la noción, para ser selectiva en el modo de invertirlo y, si no fuera pedir mucho, para detenerlo y poder saborear esos momentos mágicos que a veces suceden. 
El equipaje es ligero, como podéis observar, pero creo que con estos tres elementos sería capaz de viajar a lo largo del año que año que entra, ese que dicen que es tan valiente.