Óscar Dejuán

Óscar Dejuán


Salvar al soldado Ryan

22/05/2023

Un compañero de la UCLM me confesó antes de jubilarse. «Estoy a punto de perder la fe en la democracia por la que tanto luché. Se ha convertido en una partitocracia. El partido que gana las elecciones coloca a todos sus amiguetes en el ejecutivo, convierte al Parlamento en su cortijo y controla el poder judicial nombrando la mayoría de los magistrados. El único bastión que sostiene la democracia son las urnas. Yo sólo me siento libre y poderoso el día de las elecciones, cuando me pongo detrás de la cortina e introduzco en un sobre la lista que me parece menos mala. Suele ser la del partido en el que me crié. Pero, cuando me siento engañado por él, no me privo de la satisfacción de castigarlo».
Lamentablemente, el último bastión de la democracia, el último soldado que la defiende, también está amenazado de muerte. En España se ha venido haciendo de una forma más discreta que en Latinoamérica pero no menos efectiva. Del País Vasco hubieron de huir muchos que no comulgaban con el independentismo y sus métodos terroristas. El Gobierno de turno compra a los colectivos fácilmente manipulables mediante subvenciones. ¿Cómo no van a votarle los nueve millones de pensionistas si cada día oyen que les han subido las pensiones y lo seguirán haciendo si siguen en el poder? 
Recientemente hemos visto ataques directos al núcleo del sistema electoral. En Melilla se ha disparado el voto por correo. Al parecer una mafia política paga 200 euros por voto. Me extraña también el cambio antes de las elecciones del director general de Correos y el presidente de la empresa que gestiona el recuento electoral (Indra).
¡El 28 de Mayo hemos de salvar al soldado Ryan y a la sociedad libre y democrática que representa!