Juan L. Hernández Piqueras

Juan L. Hernández Piqueras


El otoño que viene

01/09/2022

Se acabó agosto, y Feria aparte que en Albacete es siempre la traca final del verano, el otoño ya asoma la cabeza y nos enseña la patita por debajo de la puerta para darnos unas pinceladas de todo aquello que apunta y que nos hace temer que pueda resultar un otoño largo y duro como antesala de un invierno que no será menos duro y áspero en cuanto le llegue el momento de demostrarlo. Este otoño que viene lo hace con muy mala prensa y peores augurios, el verano nos ha hecho mirar para otro lado, como no queriendo ver lo que nos rodeaba, había una necesidad sociológica de recuperar los tres años que nos ha robado la pandemia, hemos vivido el riesgo de intentar recuperar la normalidad arrebatada y con los muertos, que los sigue habiendo, fuera de los titulares y de las primeras páginas de la actualidad, aceptábamos el reto de morir de coronavirus antes que de hastío. Daba la impresión que teníamos un verano por delante y que nadie nos garantiza que lo volvamos a tener, así se han disfrutado vacaciones a nivel de antes de la pandemia, así se han llenado playas y se han atestado aeropuertos y carreteras como si de una huida generalizada se tratase. Y algo de ello había, los informativos bien se encargaban de envolver la noticia de que el nivel del turismo recuperaba las cotas prepandemia, mientras los muertos por el virus ya casi ni se contabilizan o nos narran la guerra que padece la Ucrania invadida por Putin casi a regañadientes y por pura rutina. El otoño que viene será duro, pero más para unos que para otros. Especialmente duro para los de siempre, los que escuchan las noticias. No tanto para otros, quienes las protagonizan, los que permanentemente ganan.