Enrique Belda

LOS POLÍTICOS SOMOS NOSOTROS

Enrique Belda


Divide y vencerás

27/10/2020

Los detractores del Gobierno aparecen enfrentados mientras la gestión de la pandemia y la economía es objetivamente, en cifras externas y contrastadas, pésima. Natural y lógico: cuando tus adversarios están divididos tú estás encantado, y haces lo posible porque esa situación continúe. Determinados políticos, además, se encargan de alentar la cizaña y las diferencias entre sus rivales para consolidar las posiciones propias, especialmente cuando tales divergencias existen y favorecen a corto plazo a ciertos líderes.
Lo han hecho todos los gobernantes españoles y en todo tiempo, y ahora le corresponde este proceder ‘de libro’ a Pedro Sánchez. Lo usa particularmente bien, puesto que añade a las tradicionales maniobras de encelar a unos contra otros, gasolina histórica para quemar a toda la ciudadanía reabriendo heridas cicatrizadas.
¿Es malote el señor presidente? Ya sabemos que sí, pero ahora tocaría dejar de mirarse el ombligo como ciudadanos. Estos días de la moción de censura de VOX me he cansado de oír a votantes de tres partidos situados a la ‘derecha’ del PSOE, que las elecciones se ganan juntos y que los líderes han de converger.
No sé en qué país viven: nadie va a ceder su posición de liderazgo sobre el corral propio abandonando sus ideas y cargos, por mucho que la finalidad principal sea desalojar a este PSOE/Podemos del gobierno. Encima, viendo que casi una docena de grupos, sin necesidad de concurrir juntos a elecciones, echaron a Rajoy, no parece que vayan a dar el paso de renunciar a sus partidos para concurrir en candidaturas conjuntas próximamente. Señores y señoras, los que tienen que decidir son ustedes con su voto, sacando conclusiones de cuándo merece la pena votar a uno u otro. Aclárense si quieren que España se aclare, pero no esperen que partidos que en el fondo tienen planteamientos e intereses distintos hagan ese trabajo por ustedes. Personas que me han votado cuando he concurrido a cualesquiera elecciones me advierten, imperativamente, de la necesidad de ‘unión de las derechas’.
Cuando les contesto que, descendiendo a los detalles, y abandonando la brocha gorda de las soflamas, tras la desaparición de las ideologías del siglo XX, se puede comprobar una mayor afinidad entre los programas del PSOE y el PP que tratan aspectos medulares de nuestro país (Derechos Humanos, Europa, Comunidades Autónomas, Políticas Sociales) que entre PP y VOX, me miran muy mal y me advierten que tengo un problema. Ya lo creo que lo tendría para ganar una elección interna dentro del PP, por lo que no me puedo presentar a un congreso de partido, pero estoy convencido de que el drama lo vivirán todos aquellos que piensan que la alternativa al PSOE se hace desde una trinchera meramente conservadora y ensimismada en la exageración o en el simbolismo, pues así terminarán construyendo una oposición muy fuerte y autocomplaciente, pero no ganarán las elecciones. Estas las ganamos la mayoría crítica de personas que estamos en el centro (centro derecha o centro izquierda), y que solo cuando cambiamos de voto decididamente al encontrar opciones dialogantes, somos capaces de derribar gobiernos. La división entre adversarios del poder seguirá existiendo, pero solo nuestra actitud votando y opinando permite romper tópicos y bloques, alcanzando la verdadera unidad útil para España, que no es la de las derechas con las derechas, sino la de españoles con españoles.