La incertidumbre que rodea a la próxima temporada en todas las competiciones deportivas no es ajena a la Federación de Baloncesto de Castilla-La Mancha, que desde el primer momento ha mostrado su sensibilidad con los clubes de la región, a los que ha tratado de informar en todo momento de la situación y a los ha tenido siempre muy presentes en la toma de decisiones. Esta semana, la Fbclm envió una carta a los clubes informando de las diferentes medidas que se están estudiando de cara a la temporada 2020-21.

Una de estas medidas es la de retrasar el plazo de inscripción. De momento no hay fechas definidas, porque todo está a la espera de la evolución de la pandemia. «Se establecen varios escenarios de inicio de competición que podrían ir desde octubre a enero, por lo que se trabaja en varias estructuras de competición», indica la misiva.

Antes de abrir el plazo de inscripción se habilitará uno de preinscripción «en el que los equipos podrán registrarse en la categoría en la que tengan derechos deportivos y también en la inmediatamente superior si desean acceder a una posible vacante».

Uno de los temas que está trabajando la Federación es facilitar a los clubes su participación «a través de posibles reducciones en los costes de participación» ya que se tiene muy clara la repercusión negativa que tendrá la pandemia en la economía de los clubes de Castilla-La Mancha.

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