La pólvora ha unido a numerosas poblaciones que han alzado la voz por el alto precio de la misma y por los problemas de abastecimiento. La noticia saltaba hace unos días y los festeros de poblaciones de cinco provincias se ponían en pie de guerra y criticaban abiertamente contra el precio abusivo de la pólvora para arcabucería.
Ante la última subida del precio de la pólvora, tan inesperada como desproporcionada según aseguran representantes entidades festeras de casi una veintena de poblaciones de las provincias de Alicante, Murcia, Valencia y Albacete, denunciaban la difícil situación en que se encuentran sus fiestas si este problema al final no se soluciona, por lo que solicitan a quien corresponda que se tomen medidas. El pasado lunes se reunían en la ciudad valenciana de Ontiyent, encuentro al que asistió David González, presidente de la Agrupación de Comparsas de Almansa. Éste señalaba que «ya no es sólo un problema para las fiestas de Moros y Cristianos, sino también para todas aquellas poblaciones que hacen recreaciones históricas, como ocurre en Almansa con la recreación de la Batalla de 1707».
Ayer comparecían en rueda de prensa el concejal de Fiestas, Francisco López, junto al presidente de la Agrupación de Comparsas de Moros y Cristianos de Almansa, David González, y Nuria Sánchez, responsable de la pólvora de la Agrupación de Comparsa de Almansa, y José Antonio Blanco Sáez, responsable de la pólvora de la Asociación Batalla de Almansa 1707.
Se han unido para pedir «que la empresa sea consciente de que el alto precio puede afectar a muchas poblaciones, que vuelvan al precio que estaba estabilizado, ya que en el periodo de 10 años la subida ha sido de un 300%, se trata de una subida abusiva y desproporcionada, y puede que muchas fiestas corran peligro sus actos de arcabucería y en otras la totalidad de sus fiestas».
Reclaman la ayuda de los políticos para que los ayuden y medien en este conflicto que existe con la empresa, ya que es la única comercializadora de pólvora negra en España, que en numerosas ocasiones les ha vendido pólvora de deficiente calidad, y envasada en bolsas de 25 kilos y no en envases de un kilo, como se encuentra dispuesto por la ITC 26 del Reglamento de Explosivos con el que deben cumplir. Aseguran que la causa de todo esto ha sido el siniestro que se produjo en la fábrica que la empresa comercializadora tenía en Alemania.
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