La programación de cine de verano familiar incluida en el ciclo Respirando Cultura, retoma hoy y mañana las proyecciones en el nuevo escenario habilitado en el Recinto Ferial, junto a la Capilla de la Virgen de los Llanos, que ya acogió a finales del pasado mes las proyecciones de cortometrajes de Charles Chaplin y el pase de La trinchera infinita.

En esta ocasión el público podrá disfrutar hoy de cortos de Laurel y Hardy y el miércoles, día 5, de Harold Lloyd, ambos días a las 20,45 horas, «con el fin de mejorar la experiencia de proyección dado que pudimos comprobar que a las nueve y media todavía había demasiada luz ambiental», apuntaba el director de la Filmoteca, Jesús López.

Posteriormente, a las 22 horas, se proyectarán sendos pases de la película surcoreana Parásitos, que logró cuatro Oscar de Hollywood (mejor película, director, película internacional y guión original) en 2019, una feroz sátira que narra el desesperado intento de una familia en situación de exclusión social de sobrevivir a costa de otra acomodada, sin duda una de las grandes sorpresas de la pasada temporada.

gran pantalla. López recuerda que el ciclo comenzó en el parque de Abelardo Sánchez el 22 de julio, lugar donde habitualmente tenían lugar los pases en años anteriores, con El mejor verano de mi vida, y continuó los días 28 y 29 en el Recinto Ferial, donde se ha instalado una pantalla aún de mayor tamaño -de 50 metros cuadrados- con un equipo de proyección similar al del Capitol.

«El primer fin de semana en el parque fue un lleno absoluto, respetando el aforo y las medidas establecidas, aunque sí es cierto que en el Recinto Ferial la asistencia no ha sido la misma, porque quizás el público no está acostumbrado a este emplazamiento, en cualquier caso la pasada semana asistieron un centenar de personas a ver los cortometrajes; en este caso el pase de Parásitos pensamos que tendrá mayor número de público, aunque es preferible realizar más sesiones de la misma película con el fin de distribuir esa afluencia y respetar las necesidades de control del aforo derivadas del protocolo del Covid-19, mucho más fácil de controlar que en otros eventos de ocio nocturno».

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