La contratación de Pedro Tanausú Domínguez 'Tana' por parte del Albacete Balompié causó una sorpresa relativa al ser un viejo conocido de Toni Cruz, el director deportivo del club, aunque su incorporación plantea dudas razonables acerca del rendimiento que puede ofrecer un futbolista que lleva prácticamente 10 meses sin competir a alto nivel y dos años sin hacerlo con regularidad.

La confianza de Cruz en el futbolista y las condiciones que mostró en el pasado se repiten como argumentos para constituirse en un refuerzo para ayudar a reflotar a un equipo en estado de ruina, aunque la trayectoria reciente de este centrocampista de 30 años obliga a una prudente reserva.

Después de tres campañas en Primera División en las que disputó un buen número de partidos, el equipo canario descendió en 2018 y su ocaso resultó paralelo al de Tana, que a partir de entonces no consiguió ser la referencia ofensiva que había sido hasta la fecha.

Ya en Segunda División, no logró hacerse con un hueco de titular indiscutible y, tras disputar 14 partidos (nueve como titular) en la primera parte del campeonato, se marchó a China en enero de 2019 para jugar en el Zhejiang Energy Greentown, donde tampoco encontró la fortuna que buscaba con tan solo siete partidos y dos de Copa. De hecho, a principios de noviembre emprendió el camino inverso hacia a su tierra natal para ser inscrito para la segunda parte de la liga de Segunda División.

Desde enero a mediados de marzo, cuando se decretó el estado de alarma, jugó siete de los 10 partidos de liga, tres como titular, y ahí acabó prácticamente la temporada para él. Con la competición de vuelta, el 13 de junio, solo jugó tres minutos en el primer compromiso frente al Girona, su última aparición en el fútbol profesional.

Una vez concluida la temporada, en los primeros días de septiembre, la UDLas Palmas emitió un comunicado en el que daba a conocer el despido del futbolista por motivos disciplinarios.

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