Surgieron hace décadas como un refugio al que huir en vacaciones, una segunda residencia para los fines de semana y el verano, pero terminaron convirtiéndose en un segundo Albacete, la otra ciudad, la de las parcelas localizadas en urbanizaciones, en las que un buen número de vecinos vive todo el año. 

Su integración con el casco urbano consolidado de la ciudad preocupa, por eso el Ayuntamiento de Albacete quiere adoptar medidas y aspira a trazar un plan especial para integrar estos asentamientos dispersos, localizados en el suroeste de la ciudad, sobre todo, en el entorno de las carreteras de Jaén, Barrax y Peñas de San Pedro. 

Hace unos días, la Junta de Gobierno Local ratificó la aprobación de este plan en el que se pretenden invertir 360.000 euros, una acción que se financia a través de la Estrategia Edusi, fondo de donde también ha salido el dinero, por ejemplo, para peatonalizar las calles del centro de la ciudad. 

Una vez que el plan de integración de las urbanizaciones reciba el visto bueno ministerial como una acción subvencionable con cargo a Edusi, se sacará a contratación. El concejal de Urbanismo, Juan Francisco Jerez, explicó que esta acción contempla dos fases. Por un lado, se invertirán 60.000 euros en hacer un estudio y determinar las necesidades y posibilidades de conectar los caminos que hay alrededor de estas urbanizaciones, con la red de vías verdes y caminos existentes en el casco urbano. Se busca diseñar un sistema de carriles bicis y sendas peatonales que conecten las parcelas con la ciudad y de paso «estructuren el paisaje».

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