Castilla-La Mancha ha dispensado cerca de 458.000 recetas interoperables a ciudadanos de otras comunidades autónomas desde su incorporación a proyecto en julio de 2017, del que participan ya el conjunto de las comunidades autónomas del país, tras la incorporación a mediados del pasado mes de marzo de la Comunidad de Madrid. Por su procedencia, son los ciudadanos de la Comunidad Valenciana los que más se han beneficiado de este servicio, con más de 234.101 recetas dispensadas, más del 50 por ciento del total.

El principal objetivo del proyecto de receta interoperable es que los pacientes puedan moverse por todo el territorio nacional y obtener sus medicamentos prescritos en cualquier farmacia del país, con independencia de dónde haya sido recetada y sin necesidad de presentar su receta en papel, según ha informado la Junta en nota de prensa.

Además de las ventajas que aporta a los pacientes, la receta interoperable ha permitido reducir la carga administrativa de los profesionales de Atención Primaria, ya que al no tener que dedicar parte de su tiempo de consulta a la prescripción de recetas, pueden optimizar sus agendas y ofrecer una atención más completa a los ciudadanos.

Por su procedencia, son los ciudadanos de la Comunidad Valenciana los que más se han beneficiado de este servicio, con más de 234.101 recetas dispensadas, más del 50 por ciento del total. Le siguen los de la Comunidad de Madrid, que a pesar de llevar poco más de dos meses incorporados, ya han retirado cerca de 58.000 recetas en farmacias castellano-manchegas.

A continuación se sitúa Cataluña, con más de 43.300; Extremadura, con 20.177 recetas dispensadas; Andalucía, con casi 20.000 y Aragón, con poco más de 15.000.

Las oficinas de farmacia de la provincia de Cuenca son las que más dispensaciones han realizado desde julio de 2017 en Castilla-La Mancha, con un total de 153.470, casi el 34 por ciento; seguidas por las de Albacete, con 108.226; Toledo, con 84.903; Ciudad Real, con 63.706 y, por último, Guadalajara, con 47.769 dispensaciones.