Gabriel Sosa Barroso, artista plástico y profesor, presenta este mes en el Estudio de Arte Pablo Alfaro, de calle Collado Piña, 20 de la capital, Prohibido fijar carteles. El pintor de Talavera de la Reina comentó a La Tribuna de Albacete las singularidades de este proyecto. 

¿Cómo surgió esta exposición en Albacete?

Bueno, es un trabajo que vengo elaborando desde hace tiempo.  Además, con Pablo Alfaro tengo una relación muy estrecha, somos de la misma generación, estudiamos juntos, y siempre ha estado muy pendiente de mi trabajo. Una vez que completamos esta serie, un estudio concreto, pensamos que era el momento de exponerla. 

A primera vista, parece collage, pero nos engañamos con esa apreciación.

Claro, no es así, es un trabajo al óleo, digamos que muy académico, lo que pasa es que da ese aspecto de collage, como si fuese un papel real. 

 ¿Hablamos de realismo pictórico en este caso?

Sí, digamos que aparentemente es un trabajo muy realista, a cierta distancia, pero cuando te acercas aprecias que es algo más pop. Pasa como con el impresionismo, si te alejas un poco, es más realista incluso.

¿Pop art, entonces?

Digamos que una versión moderna del pop, porque hay ciertas tramas estilísticas que no son todas pop, hay un trabajo más académico, más purista, en esta serie completa de nueve obras.  

¿Pensadas para conformar una  serie?

En los inicios, las primeras obras, que son las más grandes, no estaban pensados para una serie, eran cuadros independientes, pero pensé posteriormente en completar una serie. En los inicios era más una experimentación. 

¿Le gustan las series?

Es mi primera serie, es todo nuevo, tanto la temática como la estética de los cuadros y lo de la serie incluso. 

¿Qué sugiere con estos trabajos?

Estéticamente este tipo de trama que forman los carteles me llama mucho la atención, me parecen tremendamente bonitos. Además, me di cuenta que sugieren ciertas tramas lingüísticas, aparecen mensajes entrecortados en esas frases y, con el paso del tiempo, cuando el cartel está destrozado, esas tramas lingüísticas pierden su significado inicial  para adquirir otro y es muy interesante esa parte también, además de la estética.  

¿Trabajó sobre tabla?

Efectivamente, me gusta la tabla por la rigidez que aporta y me da la  impresión que es más matérico y recuerda más a una valla publicitaria.  

¿Utilizó vallas reales?

Voy rescatando vallas publicitarias de carreteras y de ciudad o muros. A veces compongo y en otras ocasiones no hace falta, es tan tremendo ya lo que encuentro que no necesito hacerlo. 

¿Un punto y aparte en su trayectoria artística?

Mi pintura supone una experimentación constante. No soy una persona de una obra en la que siempre insistes en lo mismo, experimento. Ahora mismo, por ejemplo, trabajo en una serie completamente abstracta, diferente, aunque es verdad que la pincelada de un pintor siempre está ahí. Uno de los cuadros de la exposición, concretamente, está a camino entre lo uno y lo otro, es algo menos realista.  

¿La obra que expone estos días es reciente?

Completamente, los últimos los terminé pocos días antes de inaugurar.