Maestranza Aérea de Albacete está en vías de solucionar un problema detectado hace tiempo pero sin una solución sencilla: el pozo en concesión del que hacían uso para dar suministro de agua a los talleres empezó a dar altos índices de concentración de nitratos y sulfatos que hicieron desaconsejable el consumo humano. Un contrato de suministro de agua embotellada en garrafas solucionó el abastecimiento, y de hecho ese contrato se va a mantener después de que se solucione la calidad del agua, pero Defensa trabaja en tener lista pronto la rehabilitación del pozo proyectada, una prospección a más profundidad para acceder a un segundo acuífero donde el agua sí tiene la calidad necesaria.

Fuentes de Maestranza Aérea explicaban a La Tribuna que dicho pozo ya está hecho pero ahora queda regular el caudal a extraer: «La perforación está hecha, el pozo lo sella la Confederación Hidrográfica y es la que nos señala que es un acuífero más profundo, que tarda más en rellenarse, y hay que estudiar qué bomba instalamos para evitar que el acuífero se pueda secar». En todo caso, las mismas fuentes militares aseguraban que «ese agua que sí que no tiene sulfatos y nitratos en esos niveles de concentración se va a usar para los procesos industriales de Maestranza y para el riego, para el consumo humano ya tenemos las fuentes  de garrafas, son fuentes que ya se estaban empleando antes de que detectaran esos niveles de hidratos».

La prospección para tener acceso al nuevo acuífero se ha hecho hace poco debido también a la necesidad de buscar presupuesto para la actuación.

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