Desde el sindicato USO denunciaron ayer que las diferentes empresas del Transporte Sanitario Terrestre de Castilla-La Mancha se han visto desbordadas ante la situación de alarma sanitaria y que han buscado medios de protección (EPI) para los trabajadores. Añaden que los trabajadores, a pesar, de la situación de inseguridad siguen al pie del cañón cada día, aunque suponga un riesgo para ellos mismos y para sus familias.

El sindicato da las gracias a la generosidad de algunas empresas locales que han donado en las diferentes localidades; trajes de buzo, mascarillas, batas y guantes, se está pudiendo trabajar en mínimas condiciones de seguridad, aunque lamentablemente no llega al 100% del personal.

«En primer lugar queremos manifestar que estaremos eternamente agradecidos por esas donaciones, pero nos deja perplejos que las soluciones que se aportan vengan de la sociedad civil y no de la administración», exponen María Notario, secretaria general de USO en la empresa SSG Guadalajara y Juan Ángel Rubio, delegado sindical de USO en UTE Cuenca.

Indican que el Sescam actualizó recientemente los protocolos de seguridad, que suponen un cambio drástico de un solo uso a multiuso mediante desinfección, «demostrando así la falta de previsión y la mala gestión de la situación». A pesar de las promesas de proporcionar el material necesario, dicen que este nunca llega.