El hombre que fue condenado, el pasado octubre, a 23 años de prisión por matar a su cuñada asestándole un centenar de puñaladas en su piso de la calle Blasco Ibáñez, ha sido absuelto del delito de agresión sexual continuada, por el que la acusación solicitaba 21 años de cárcel.

El Tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial cree que las relaciones que mantuvieron se produjeron cuando la denunciante tenía 15 años y no 12, como defendían Fiscalía y acusación particular y que fueron consentidas.

A pesar de la absolución por el delito principal, el procesado si que ha sido condenado a seis meses de cárcel por amenazar de muerte a la menor, delito por el que la acusación pedía dos años de prisión.

La defensa. El abogado defensor, José Luis Serrallé, se mostraba satisfecho con la sentencia. «Estamos muy satisfechos, porque yo, desde el minuto uno, sabía que él no había mentido. Él reconoció esas relaciones sexuales con su prima, pero en el momento que ocurrieron, con el Código Penal vigente entonces, si que podía tener relaciones sexuales consentidas, independientemente de que se pueda considerar moralmente reprochable».

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