A través de una carta abierta remitida a los medios de comunicación, firmada por varias de sus integrantes, la Red Feminista de Albacete volvió a denunciar, ayer, el «acoso» al que entienden que son sometidas las mujeres que acuden a interrumpir voluntariamente su embarazo a la única céntrica clínica de la ciudad en la que se les presta esta atención.

Lola Gómez, en representación de este colectivo, recordó que lo que denuncian sucede desde hace tres años, si bien ahora han vuelto a reclamar la «implicación de las administraciones» tras ver «el panfleto que el grupo católico trata de entregar a las mujeres, rompiendo su derecho a la intimidad».

Recordó que las prácticas se llevan a cabo desde el movimiento Red de Madres y lamentó que «también arremeten contra el personal que trabaja en la clínica».

Por su parte, desde Red de Madres, su fundadora y voluntaria de la misma, Paloma de Castro, defendió, cuestionada por este diario, que «nosotras lo único que hacemos es informar a la mujer que nos quiere escuchar. La calle es libre».

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