Jesús Castellanos ha concluido su etapa como entrenador del Villarrobledo tras la decisión del club de un cambio de aires. Aun con un poso de amargura, pero con resignación, el técnico explicó a este diario su experiencia y la etapa de incertidumbre que se abre a corto plazo.

Se esperaba la decisión o le llegó por sorpresa?
Al mantener la categoría, el contrato se renovaba automáticamente y en ese sentido no lo esperaba. El año ha sido complicado, con momentos en los que estuvo a punto de tomarse una decisión, pero al final la situación se resolvió y quedaban solo 10 partidos. Pero esto es fútbol, el año ha sido complicado y se me ha explicado que había que dar un giro e ilusionar, y por ahí lo puedo entender.

Se supone que se habrá contemplado ese año de contrato adicional por mantener la categoría.
Imagino que habrán tenido en cuenta esa consecuencia. Ya lo hablamos y se va a resolver.

El caso es que se obtuvieron grandes logros en un momento extraordinariamente difícil.
Llegamos al club cuando era prácticamente un solar, y ahora se ha estructurado y estabilizado. Este año hubo limitaciones tremendas, se hizo frente a muchas cosas y no hubo para otras, ni en plantilla ni en recursos. Este año el club puede estar más asentado pero toca salir, y este sentido se me queda una espina, aunque tengo una buena relación personal con la directiva y entiendo que esto es fútbol y puede pasar. Aun así, les deseo lo mejor. (MÁS INFORMACIÓN EN LA EDICIÓN IMPRESA)