El Alba tuvo su 'día de la marmota'

Juan Carrizo
-

2
UD Logroñés
0
Albacete Balompié
Finalizado
El equipo de López Garai volvió a perder ante el Logroñés en Las Gaunas, en un nuevo ejercicio de impotencia ante un rival que ganó con la ley del mínimo esfuerzo

Un lance del encuentro disputado en Las Gaunas. - Foto: David Perez Cejuela

El Albacete sufrió una nueva derrota en lo que fue su enésimo 'día de la marmota'. Un penalti, facilidades defensivas e impotencia ofensiva; más de lo mismo una jornada más y el hoyo cada vez es más grande.

El equipo de López Garai entró bien en el partido, con el joven uruguayo Emliano Gómez como principal novedad en una alineación con varias novedades, como se esperaba. El Logroñés cedió el balón y esperó, con tranquilidad, presionando en cuanto el equipo manchego daba un paso adelante y aprovechando al máximo sus opciones. Así, en el minuto nueve Liberto arrollaba a Iago López dentro del área y De la Fuente Ramos señalaba penalti. Otra vez una pena máxima. Andy anotaba y el partido ya estaba a las primeras de cambio cuesta arriba para el conjunto manchego.

El Logroñés estaba cómodo esperando a un Albacete que lo intentaba, pero se chocaba de frente con su incapacidad para generar ocasiones claras. La luz se apaga cuando el balón se aproximaba al área rival, pero todo pudo cambiar en un balón que se le escapó de las manos a Santamaria. Emiliano metió la cabeza pero el balón tocó en la madera y se fue fuera.

Liberto tenía que dejar el partido por una molestias musculares en la parte trasera de su muslo izquierdo y entraba Nahuel Arroyo en el minuto 31. El bando roijano defendió con orden su ventaja y con eso fue suficiente para llegar 1-0 al descanso.

La segunda mitad empezó con un cabezazo de Ruiz que salvó Tomeu y el partido pareció dar un vuelco en el minuto 61, cuando López Garai metió de una tacada a Álvaro Peña, Álvaro Jiménez y Ortuño por Caballo, Silvestre y Emiliano. El Alba dio un paso adelante y pareció tener algo más de pegada. Un disparo de Manu Fuster pegado al palo que paró Santamaría fue la mejor opción.

Pero en el Alba todo es ficticio. Sin gol no hay nada y el Logroñés, con una facilidad pasmosa, hilvanó una jugada en el minuto 68 que acabó con el gol de Jaime Sierra que sentenciaba el choque.

De ahí al final, ejercicio de impotencia de un Albacete que sigue su particular calvario en un partido que fue más de lo mismo ante un rival que con la ley del mínimo esfuerzo se llevó los tres puntos.