Madrid es su principal centro de operaciones profesionales. Entre las que destaca su amado género lírico. No es de extrañar, pues, que a lo largo del año casi recién comenzado, vuelva a la carga uniendo ambos amores virtuales y reales. Porque, dentro de los abundantes proyectos que alberga para este 2020, varios de ellos sobre los escenarios de la capital de España -incluyendo sus clases en el Centro Universitario de Artes TAI, la más prestigiosa, antigua y polivalente academia al respecto-, hay uno que le motiva de manera muy especial: una nueva antología de la zarzuela sobre las tablas de los Teatros del Canal. Pongamos que se escribe del polifacético Juanma Cifuentes.
Porque ‘el Cifu’, como se le conoce y valora en todos los círculos relacionados con sus amplias actividades –que también incluyen cine y televisión-, es el autor «de un espectáculo muy grande», como lo califica, que va a aportar las difíciles novedades que pueden barruntarse sobre algo tan trillado como la zarzuela. Tan grande que pese a sus deseos de salir al escenario disfrutando de sus más que demostradas, y aplaudidas, aportaciones habituales en su doblete de tenor y cómico. No le da «para actuar y dirigir», como se lamenta. Dentro de esas novedades, una será muy esencial, porque va a tratarse de un homenaje a Madrid.
Sólo faltan algunos flecos que cerrar con los programadores y responsables de los Teatros del Canal, dependientes directamente de la Comunidad de Madrid y en menor medida del Ayuntamiento. Y, de no surgir algún poco probable imprevisto, a lo largo de este mes de enero quedará cerrado el proyecto, que podrá verse en el segundo trimestre. Eso sí, muy diferente a su particular Antológica de Zarzuela, que se desarrollaba en el Teatro Gran Vía y con el que Juanma ha tenido un gran éxito los fines de semana de noviembre y diciembre.
Aquel era un espectáculo muy digno, también con textos del albaceteño, pero más corto, lo que le permitía cantar junto a la soprano Beatriz Lanza, que se ideó con «ganas de entretener, divertir y emocionar, sin necesidad de hacer el montaje más caro de la historia, pero tampoco el más cutre», cual sostiene Cifuentes, satisfecho de las buenas críticas y de que calara incluso entre parte de un público desconocedor del género y en el que funcionó mucho el boca a boca. Hasta el punto de que es más que posible que su productor, Carlos Pardo, lo lleve de gira por varias ciudades españolas, ya que hay varios distribuidores interesados, sin descartar que también viaje a diversos países latinoamericanos.
Esta faceta del Cifu de director en espectáculos del género lírico –amén de la de tenor y autor de los textos- también la tiene en el teatro, donde, por supuesto, igualmente le alcanza como escritor, dramaturgo y actor. Son muchas las obras que, en estas sus diversas vertientes, el albaceteño ha paseado desde hace dos décadas largas por multitud de salas madrileñas. Y pronto habrá otra, Histerias de amor, con una de las compañías independientes más acreditadas, Martelache, a la que dirigirá y cuyos ensayos iniciará en febrero.
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