Bonete: En el epicentro de la comarca

Ana Martínez
-

Bonete quiere revitalizar e impulsar su polígono industrial y aprovechará su situación estratégica junto a la autovía para incentivar la llegada de empresas

Manuela Calero y Paco Ráez pasean junto al Centro Cultural de Bonete. - Foto: Rubén Serrallé

Destacan que es pueblo acogedor, lleno de muy buena gente, en el que existe muy buena relación entre los vecinos. Fue un municipio muy industrializado en la década de los 80 del siglo pasado, pero hoy pertenece al grupo de la España despoblada».

Y bien que lo sienten dos de sus residentes: Manuela Calero, maestra jubilada, y Paco Ráez, director de la Caja Rural, ambos bonetenses de nacimiento y habitantes de esta localidad durante su vida laboral. Recuerdan con nostalgia aquellos años 60 en los que Bonete llegó a empadronar a unos 2.500 vecinos gracias a la influencia del sector del calzado en Alicante. «Al menos 500 bonetenses estuvieron vinculados a las fábricas de calzado de la zona alicantina, y otros, muchos menos, a las de Almansa», cuenta Paco Ráez, que lamenta que la última fábrica de calzado cerrara en el año 2020.

Una de las singularidades de Bonete es su situación geográfica, estratégicamente por naturaleza. Prácticamente pegado a la A-31, se encuentra a una distancia de 100 kilómetros de importantes capitales españolas como Valencia, Alicante y Murcia, siempre por autovía. Sin embargo, hoy depende en exclusiva de la agricultura y la única industria que genera puestos de trabajo, con una plantilla de 30 trabajadores, es una granja porcina. Esto después de perder un importante y clave sector de comercialización de champiñón y setas.

Ante esta situación de despoblación y desindustrialización, Paco Ráez avanza que desde el Ayuntamiento se está haciendo especial hincapié en trabajar por poner en valor el polígono industrial de Bonete, ya que en el municipio entienden la importancia del sector Industria para crear puestos de trabajo y evitar el éxodo de las familias jóvenes bonetenses. Ambos corroboran que la población actual está muy envejecida, tanto que hasta con datos sobre la mano, 233 habitantes tienen más de 65 años frente a 136 que cuentan con menos de 18.

Ante esta pirámide invertida, la localidad de Bonete trató de construir un centro de día, pero ahora se ha despertado el interés por convertirlo en una residencia para personas mayores con unas 80 plazas. Esta población mayor cuenta hoy en día con los servicios que ofrece el Hogar del Jubilado y el servicio de ayuda a domicilio para aquellos que tengan problemas de movilidad.

Especialmente por estas personas mayores, pero en general por todo el vecindario, tanto Manuela como Paco consideran necesario mejorar el servicio de transporte público que conecte Bonete con otras localidades y con la capital de la provincia, dado que en estos momentos «está muy mal» y no tiene una frecuencia muy fluida. «Si tenemos alguna carencia es en el transporte público, cuyo servicio es claramente insuficiente», añade Paco.

 

(Más información en edición impresa y en la APP de La Tribuna de Albacete (https://latribunadealbacete.promecal.es)).