Mathías Olivera jugó la pasada temporada en el Albacete, cedido por el Getafe, que en el mercado invernal forzó al club manchego a devolver al jugador. El lateral izquierdo había hecho buenos amigos en la capital manchega y son muchas las veces que se le ha visto por la ciudad. El sábado no estaba convocado para el partido Getafe-Alavés, aunque estuvo presente en el Estadio Alfonso Pérez. Después viajó hasta Albacete y se vio involucrado en un altercado en un local de la zona ya a altas horas de la madrugada. Tras la llegada de la Policía Local, el jugador acabó siendo detenido por resistencia a la autoridad. Pasó la noche en las dependencias de la Policía Local, que tras tomarle declaración lo dejó en libertad en torno a las 12 del mediodía.
El jugador ya ha dado las explicaciones pertinentes en su club y se expone ahora a un expediente disciplinario por parte del Getafe.