El Fundación Albacete no tiene margen de error. Comienza la jornada con cuatro puntos de desventaja sobre el líder Santa Teresa, en una competición en la que sólo hay premio para el primero.
Por ello, el equipo de Miguel Ángel Quejigo está obligado una semana más a lograr el triunfo para, como mínimo, no aumentar la distancia con el líder. Tiene que jugar en casa del Alhama y su partido es el último de la jornada. Está previsto para las 17 horas, con lo que sabrá lo que han hecho el resto de rivales, lo que puede motivar o meter más presión.
Además el campo no favorece en nada al juego combinativo que hace el Fundación. De pequeñas dimensiones y un césped artificial muy desgastado no será beneficioso para el cuadro albacetense, como ya se pudo comprobar en la primera vuelta, cuando el club obligó al equipo a jugar contra el Alhama en el campo de césped artificial de la Ciudad Deportiva y dejó escapar dos puntos que ahora podrían ser muy valiosos.
(Más información en la edición impresa)