Sato Díaz vuelve al teatro con 'Un cuerpo a la deriva'

Emilio Martínez
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El actor y también periodista se ha visto obligado a cerrar 'Cuarto Poder', el digital que dirigía

El actor y periodista albacetense, Sato Díaz, se encuentra con los ensayos de una nueva obra de teatro. - Foto: María Articas

Nada tiene que ver el título de la obra con la que a finales de este mes de abril, en concreto el viernes 30, vuelve a las tablas José Díaz Satorre, más conocido en el ambiente profesional de las artes escénicas y en el del periodismo como Sato Díaz. Aunque podría aplicarse a la realidad, nada tiene que ver este Un cuerpo a la deriva que va a protagonizar el albacetense en el Teatro Umbral de Primavera con su situación profesional como informador. Porque el pasado día 31 de marzo las circunstancias económicas en turbia mezcolanza con la pandemia que no cesa le obligaron a cerrar el periódico digital Cuarto Poder, que en su década larga de existencia se había ganado un lugar con sello y vitola propios en el panorama madrileño en particular y también en el general. «No, no ando a la deriva; lo llevo bien, dentro de lo que cabe», sentencia.

El caso es que ahora va a poder dedicarse casi de manera íntegra o al menos con la dedicación que –a la fuerza ahorcan, cual el aserto refranero- antes le impedía estar al frente de esa publicación. Y para ello, nada mejor que hacerlo con esta creación de Pedro Martín Cedillo, una de cuyas obras anteriores ya protagonizó con éxito el paisano. Ya metido en preparativos y ensayos, junto a Pedro Rubio, con quien comparte protagonismo y bajo la dirección de Carlos Be, el albaceteño explica que Un cuerpo a la deriva está contado «con mucho humor y mucha carne para que el público disfrute y se lo pase muy bien».

Y amplía añadiendo que es algo así como el cuento de La Sirenita, de Hans Christian Andersen, deconstruido y contado en tres planos: «Por un lado, una historia de amor imposible entre la sirena y el humano; por otro, la relación no correspondida del propio Andersen con un amigo-amante, algo que en aquel momento era imposible, y por otra parte, la relación amistosa y afectiva entre Juanpe (yo) y Alberto (Pedro), un director teatral y un actor que están preparando una obra de teatro sobre ese amor no correspondido del autor del famoso cuento».

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