El Club Baloncesto Villarrobledo disputará la última jornada de la fase de ascenso a LEBOro en el pabellón Antonio Díaz Miguel de Alcázar de San Juan tras no poder hacerlo en casa por motivos de seguridad al coincidir con la celebración  del festival de música Viñarock.

Así lo explicaron ayer el presidente del CBV, José Luis Melero y el directivo Chema Martínez, que ofrecieron una rueda de prensa para explicar la situación.  «Se están difundiendo muchas noticias por las redes sociales -señaló Melero-, pero nosotros ya hicimos un comunicado con las causas por las que nos tenemos que ir y lo queremos aclarar. Las dos últimas jornadas tienen horario unificado y no se pueden mover los partidos de horario, pero sí de campo, aunque en Villarrobledo no tenemos otro pabellón que no sea el Pintores que cumpla con la normativa de la competición, tenemos la posibilidad de jugar en Alcázar de San Juan y será allí porque las otras alternativas eran La Roda y Albacete, pero ellos juegan en casa esa jornada y es imposible, por eso hemos llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento de Alcázar para poder disputarlo allí».

Melero indicó que «el Ayuntamiento de Villarrobledo ha intentado que se jugará aquí, porque desplazar al equipo y a toda la afición fuera es tedioso para todos, sobre todo para el club en este momento histórico y que nos gustaría vivir aquí, pero el motivo principal es por seguridad. La Junta de Seguridad del Viñarock dice que no puede coincidir el partido con el festival porque es una vía de emergencia y tiene que estar libre».