David Andrés, humorista, monologuista, no para. Tiene un verano lleno de galas y hoy estará también en Villahermosa, con tres grandes compañeros. El artista comentó a La Tribuna  de Albacete sus sensaciones ante estas citas. 

¿Muchas galas después de unos meses complicados?

La verdad es que yo no me puedo quejar y llevo un verano bastante movido, entre actuaciones reprogramadas y las que salieron nuevas, porque sinceramente, la gente tiene ganas de reír y divertirse ya de una vez. Así que un verano bueno. 

La suerte que tenemos es  que al actuar para ayuntamientos y asociaciones culturales han vuelto a programar, respetaron los contratos que teníamos, pero también en otros casos, aunque no hubiera contrato por medio, se han acordado y me han dicho que querían contar conmigo, así que estupendo.  

¿Actuaciones en la región?

Bueno tengo muchas actuaciones en nuestra región, en Castilla-La Mancha, pero han salido también en Castilla y León, en Aragón, Cantabria, Madrid. Para vivir del artisteo te tienes que mover, si no es complicado salir adelante. 

Después de la cita de Viveros, debuto con Cuatro motes manchegos en Villahermosa, en Ciudad Real, porque Jesús Arenas no puede hacer esta actuación, suplo su baja.

¿Considera que la situación mejora?

Veras, puede haber alguna suspensión puntual todavía, por causas sanitarias y esperemos que no se produzcan porque la situación mejore día a día y que la gente se atreva a salir y disfrutar porque recordemos que la cultura es segura y en ningún sitio, de verdad, he visto tanta seguridad como en los espectáculos culturales y no es que lleve el agua a mi molino, sino porque las medidas son espectaculares, distancias, mascarillas, gel, ejemplar en todo, así que en septiembre, si no hay contratiempos, también tengo bastantes galas y fechas. 

¿Qué espectáculo es el que lleva estos meses?

Llevo unos meses con el espectáculo Reíd en tiempos de covid, que funciona fantásticamente, porque el público se siente muy identificado con lo que digo de ciertos temas que nos han pasado durante la pandemia y también intento informar sobre algunas cosas. Por ejemplo, llevar mascarilla también tiene algunas cosas buenas,  no es tan malo, no te tienes que afeitar tanto, en nuestro caso. Son algunas bromas para que la gente lo pase bien. 

Así, de momento estoy muy cómodo con este espectáculo que va muy bien, la recepción es estupenda, porque también te diría que es complicado hacer un nuevo monólogo, tienes que probar los chistes, lo que cuentas en él y ahora mismo no creas que hay tantas posibilidades de probar material nuevo, pero en enero me pondré las pilas otra vez para hacer un nuevo monólogo. 

¿Buenas expectativas para la nueva temporada?

Hay tantas incertidumbres que es un poco complicado  hacer alguna previsión. A mí me tranquiliza más que me programen y luego, si se tiene que suspender por la situación sanitaria, lo asumimos. Te diría que prefiero eso a que no se haga nada ya de entrada.  Es muy importante sentir que los artistas somos útiles. Creo que la sociedad nos sigue necesitando y si no hay trabajo, al final nos tendremos que dedicar a otra cosa y se estropeará todo lo que se ganó en los últimos años, que tampoco es que fuese nada del otro mundo. Es fundamental que se nos vea como cualquier otro trabajador. 

¿El sector privado también contribuye?

Por ahora sí. Personalmente creo que el mayor problema ha estado en que no se han dado unas instrucciones iguales para todo el mundo y adaptar la situación a esas reglas, por eso había gente que no se atrevía a programar. Afortunadamente, todavía hay salas que cuentan con nosotros, confían en ti.