Los clubes de Segunda B se rebelan

Juan Carrizo
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El CP Villarrobledo y otros 20 equipos envían una carta a la RFEF y piden jugar lo que queda o anular la competición

Imagen de un partido del CP Villarrobledo en el Municipal Virgen de la Caridad. - Foto: Rubén Serrallé

Los estamentos del fútbol trabajan la manera de finalizar la temporada también en el fútbol modesto, donde la Segunda División B es su máximo exponente. Algunos clubes han aprovechado para pedir una remodelación de la categoría que dejaría a unos en primera y otros en segunda algo que no ha sentado nada bien a muchos clubes. Un total de 21 han enviado una nueva misiva a la Real Federación Española de Fútbol con una serie de propuestas, la principal de ellas que «se reanude la liga y se jueguen todos los partidos que restan, es decir, las 10 jornadas de la fase regular más el play-out y el play-off» y, si no fuera posible, «anular la temporada», por lo que no habría ascensos ni descensos.

Entre los 21 clubes firmantes de esta carta está el CP Villarrobledo, así como los otros dos clubes de Castilla-La Mancha que militan en el grupo IV de la Segunda B, Talavera y Villarrubia. Junto a ellos están Recreativo de Huelva, Algeciras, Don Benito, Mérida, Sanluqueño, Badalona, Ejea, Hércules, Las Rozas, Luanco, Llagostera, Nástic, Orihuela, Pontevedra, Prat, Racing de Ferrol, Real Unión, San Sebastián y Unionistas.

Tres son los puntos que estos clubes trasladan a la RFEF, el primero de ellos el tema de la seguridad, ya que afirman que «es nuestra prioridad preservar la salud de nuestros deportistas, técnicos y empleados», insistiendo en que «su salud es innegociable» y recuerdan que «los recursos y las infraestructura de la gran mayoría de equipos de Segunda B son limitados», por lo que «nos vemos impotentes para garantizar el 100% la salud» de todos los implicados ante los protocolos exigidos por la OMS. Ante las enormes dudas que se generan «consideramos que el conservadurismo y la prudencia ha de ser nuestros principales aliados, evitando así prematuras reanudaciones de las competiciones que pudiera generar nuevos contagios».

El segundo de los puntos defiende la necesidad que estas categorías tienen de sus aficionados. «No entendemos el fútbol de Segunda B sin nuestro público», señalan, indicando que «jugar los partidos sin el apoyo de nuestra gente no tiene mucho sentido en esta categoría». Los 21 clubes valoran tanto lo económico como lo emocional. «Los ingresos de taquilla son una parte fundamental de nuestros presupuestos», para añadir que «el factor campo es una herramienta determinante para el que juega como local». Por ello, «entendemos que la posible disputa de los partidos restantes a puerta cerrada alteraría la neutralidad de la competición».

 

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