El sistema de cámaras de vigilancia para controlar el acceso a las calles peatonales Rosario y Gaona comenzó a funcionar hace un mes y, desde entonces, son muchos los conductores que han usado estas vías pese a no estar abiertas al tráfico. Los incumplidores se enfrentan ahora a multas de 200 euros por circular sin autorización por una vía peatonal. 

De estas sanciones se libran, tras la pertinente lectura de matrículas realizada por el sistema, los residentes autorizados, vehículos de carga o descarga en horario para tal uso y los accesos al parking público de la Catedral.

Cuando el sistema comprueba que no se trata de un vehículo autorizado, se procede a la propuesta de sanción, que es revisada por agentes de la Policía Local para comprobar que se ha incumplido la normativa que regula el uso de las calles peatonales y proceder a la correspondiente sanción. 

Durante la primera semana de puesta en marcha del sistema, entre el 7 y el 13 de septiembre, las sanciones registradas ascendieron a un total de 1.626. Está previsto que esta semana comiencen a llegar las comunicaciones a los infractores, según indicaron fuentes municipales, que también resaltaron que, conforme pasan las semanas, el número de multas va descendiendo.

De hecho, durante la segunda semana, se contabilizaron 1.387 multas y 1.134 a lo largo de la tercera, del 21 al 27 de septiembre. En cuanto a la última semana, se ha apreciado una reducción importante, pues entre 28 y el 4 de octubre, el número de infracciones se situó en 1.048, lo que supone un descenso del 35% respecto a los primeros días.

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