El de ayer fue un día de muchas llamadas telefónicas en las sedes de las organizaciones agrarias, a causa del paso de la enésima tormenta de primavera por la provincia, pero de muy pocas certezas ya que por el momento ha resultado imposible acceder a la mayor parte de las parcelas.

Las zonas en las que se esperan daños son las que se vieron más afectadas el lunes por la tormenta de lluvia y pedrisco, que entró por Pozohondo y siguió por Tobarra, Hellín, Fuente Álamo, Montealegre y Almansa. El volumen de agua no fue especialmente grande pero sí muy intenso porque cayó en pocos minutos, a partir de las cuatro de la tarde.

Pedro Moreno, de Asaja-Albacete, explicaba ayer que «la mayor parte de los campos de estos municipios están impracticables; si  llueve un poco más, no se podrá entrar en parcela hasta el jueves, como poco  y los pocos datos que se den serán provisionales».

Por cultivos, las producciones que más preocupan son los viñedos, en especial los de uva blanca que son los que llevan un desarrollo más avanzado; los frutales y las producciones hortofrutícolas. En algunos municipios, como Montealegre, ya se habla de daños en el 30-40% del término, «pero esos datos se basan en lo poco que se ha podido ver, quedan muchas parcelas por comprobar».

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