La Diputación sigue adelante con el procedimiento de licitación por el cual se va a deshacer del edificio del Paseo de la Cuba que hasta 2015 albergó el Consorcio de Servicios Sociales y Gestalba. Ante la inviabilidad de reformar el inmueble, se proyectó una permuta para que la Diputación entregue la finca a cambio de recibir después dos plantas de oficinas. El resto de plantas serán destinadas con toda probabilidad a viviendas, promovidas por el constructor privado que sea adjudicatario de la permuta. La operación había suscitado no pocas dudas en el sector de la construcción, y por ello la Asociación Provincial de Empresarios del sector, Apeca, formalizó un escrito con una serie de alegaciones al proyecto, alegaciones que han sido contestadas por los técnicos y desestimadas, todas a excepción de una que pedía ampliar el plazo de presentación de ofertas. La Diputación admite tener abierto dicho plazo hasta el 28 de febrero (inicialmente era el día 11).

El documento de respuesta a las alegaciones de Apeca recoge la justificación de esta operación de permuta, un documento público donde se justifica los beneficios económicos para la Diputación, cuando no hay más remedio que tirar el edificio: «La construcción de un edificio nuevo costaría unos seis millones de euros», una cantidad que habría que detraer del presupuesto anual con el que ahora se da apoyo financiero y técnico a los municipios de la provincia. Dice además el informe que «lo solicitado en permuta está por encima del valor del mercado actual», con lo que la institución provincial conseguiría plusvalía en la operación, que es «la más conveniente para el interés público, y por ende para esta administración provincial». Más información en edición impresa