"Espero que esta situación no haga obsoletas las salas de cine"

Juana Samanes
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Estudioso. Al famoso actor australiano, nacido en el Reino Unido, le gusta investigar sobre los personajes que interpreta como ha hecho en esta película

"Espero que esta situación no haga obsoletas las salas de cine" - Foto: DANIEL MUNOZ/EPA EFE/REX/Shutter

Al actor Guy Pearce, muchos lo descubrimos en L.A. Confidential (1997), donde encarnaba a un personaje torturado pero, en más de dos décadas de carrera, ha afrontado retos interpretativos potentes en filmes como Memento o En tierra hostil. Encantador en el trato directo, pero con fama de temperamental, en El último Vermeer vuelve a demostrar su valía metiéndose en la piel de Han van Meegeren, un falsificador de obras de arte que engañó a la cúpula nazi. La película, inédita en España y sin pasar por las salas de cine, se puede contemplar en las plataformas Apple TV, Prime Video Store, Google Play, Microsoft Store y PlayStation Store.

El personaje que interpreta es fascinante, entre artista e impostor. ¿Qué le atrajo más de su figura?

Creo que su personalidad. Fue una persona bastante extrema. Por un lado, era extravagante y, por otro, era un ser humano bastante dañado. Y eso es algo maravilloso para interpretar como actor. Por supuesto también me cautivó su historia. 

En la vida real, durante el juicio, el personaje que interpreta, Han van Meegeren, se hizo famoso, casi un héroe, por haber engañado a los nazis. Supongo que, para encarnarlo, se documentó sobre su vida.

Miré un par de cosas suyas que pude encontrar disponibles online, y también algunos documentos. Me gusta investigar sobre personajes históricos, pero solo hasta cierto punto, porque realmente, si hiciera demasiado eso, podría llegar a perderme mi propia esencia en relación con la película. En este caso, leí varias cosas que me ayudaron a interpretar a Han como Dan quería que fuera. Porque era alguien a quien le gustaba el show, era vulnerable y muy narcisista.

¿Tuvo alguna inspiración en particular para su interpretación?

En este caso, hay una fotografía real de Han van Meegeren en el juzgado. A pesar de su estatismo se puede ver en la expresión de su rostro que hay un personaje realmente atractivo debajo. Y a partir de esa imagen, tuve la sensación de que él sabía cuándo seguir las reglas y cuándo ser un personaje travieso

¿Cómo fue su relación con Dan Friedkin? Porque era la primera vez que se ponía detrás de la cámara y ejercía como director.

Dan fue muy honesto desde el principio. Obviamente sabíamos que era su primera película como director, pero dejó muy claro que tenía un gran respeto por nosotros debido a nuestra carrera profesional. Es un hombre con experiencia en muchos otros aspectos: es un profesional de negocios de éxito, ha producido películas... Mi relación con él me resultó muy fácil. Estaba abierto a cualquier sugerencia que pudiéramos tener pero, al mismo tiempo, no parecía tener inseguridades acerca de ser director por primera vez. Es muy bueno delegando y fue encantador. Él, Claus y yo pasamos dos semanas antes del rodaje repasando el guion y conociéndonos y desde entonces somos amigos.

La película se estrena en España en plataformas digitales. ¿Cómo ve esta fórmula de que algunos filmes que iban a estrenarse en cines pasen, directamente, a la exhibición directa en los hogares? 

Es genial que todavía podamos ver películas y, al menos, podamos hacerlo desde casa. No obstante, soy consciente, como todos, que los cines están amenazados porque ahora podemos ver filmes en enormes televisores, ordenadores o desde nuestros teléfonos. Espero que esto no contribuya a que las salas se vuelvan obsoletas. Sentarse en un cine con otras personas frente a una pantalla gigante es una experiencia muy especial, y espero que podamos aferrarnos a eso el mayor tiempo posible, y que no se convierta en una forma de entretenimiento boutique.