El pedrisco caído en La Manchuela se cebó con el término de Abengibre

V.M.
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La intensa tormenta dejó piedras del tamaño de nueces en este municipio y provocó daños de consideración en los viñedos

El pedrisco caído en La Manchuela se cebó con el término de Abengibre

Hacia las siete de la tarde de ayer una intensa tormenta de granizo descargaba en distintas poblaciones de la comarca de La Manchuela, cebándose sobre todo en el término municipal de Abengibre, aunque el pedrisco también cayó en otros pueblos próximos, caso de Casas Ibáñez, Alcalá del Júcar y Jorquera.

La alcaldesa de Abengibre, Felicidad Alberola, informaba a este diario que la tormenta de piedra seca se prolongó por espacio de 20 minutos y provocó daños de consideración en las viñas, sobre todo a unos dos kilómetros del caso urbano en dirección a Casas Ibáñez. «Las piedras eran del tamaño de nueces pequeñas y, aunque es pronto para confirmarlo, si parece que el efecto en los cultivos ha podido ser de consideración, por lo que mañana mismo nos pondremos en contacto con los técnicos de Agricultura para evaluarlos», apuntaba la regidora, que también se refirió a los efectos en algunos caminos, «que han quedado impracticables» y en el parque.

Por su parte, el primer edil de Jorquera, Jesús María Jiménez, también comentó que la piedra provocó abolladuras en algunos vehículos, pero, a diferencia de lo ocurrido en Abengibre, parece que los daños en el campo fueron más bien escasos, «porque la piedra cayo con mucha agua», apuntó.

Finalmente, en Alcalá del Júcar y Casas Ibáñez y también se producía una fuerte granizada poco antes de las siete de la tarde, que se prolongó durante un cuarto de hora, aseguró la primera edil ibañesa Carmen Navalón. En este municipio la mayor tromba se localizaba en dirección al núcleo rural de Serradiel y Marimínguez, donde fue precisó la actuación de los bomberos a consecuencia de pequeñas inundaciones.