Hace apenas dos años que echó a andar el Equipo de Continuidad Asistencial (ECA) dependiente del Servicio de Geriatría del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete y el balance de su andadura no puede ser más positivo, por los buenos resultados que se están obteniendo en la mejora de la calidad de vida de los pacientes atendidos y en cuanto al ahorro de costes sanitario se refiere.

El geriatra Gabriel Ariza y la enfermera especialista en Geriatría Benedicta Sánchez son los artífices de este éxito, en el que el principal beneficiario siempre es el paciente y su familia, y que hasta el momento ha conseguido demostrar que el 81% de los pacientes atendidos a través de este Equipo de Continuidad Asistencial no precisaron al mes siguiente de la intervención ni ingreso hospitalario ni atención en el Servicio de Urgencias. Algo que en costes económicos ha supuesto  un ahorro para el Sescam de 1.376.000 euros y un ahorro medio por paciente visitado de 2.253 euros. En tres cuartas partes de los pacientes tratados a domicilio se consiguió dicho ahorro.

Fue en octubre de 2016 cuando arrancó este proyecto que da soporte a Atención Primaria y las residencias de mayores y que tiene como centro de la atención sanitaria al paciente mayor de 75 años. Su objetivo principal es evitar los ingresos hospitalarios y las visitas a urgencias y realizar un seguimiento domiciliario del paciente. 

Hasta la fecha ya han sido atendidos a través de este dispositivo 650 usuarios, de ellos la mitad concretamente a lo largo de 2018. 

Los resultados preliminares de este servicio ya se presentaron el año pasado en diferentes congresos científicos de Geriatría tanto a nivel regional como nacional y europeo, y se expondrán de nuevo este fin de semana en el transcurso del Congreso Regional de Geriatría que se celebra en Ciudad Real. 

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