La empresa Gestión Ambiental de Castilla-La Mancha (Geacam) abrió esta semana las licitaciones para una de sus principales campañas de prevención de incendios forestales: la limpieza de montes públicos y privados a través de la eliminación de residuos forestales.
Esas tareas, que requieren de una maquinaria específica, suelen contratarse a empresas externas de gestión forestal y se realizan durante las temporadas de primavera y otoño. Para este año, la entidad regional aumentó la inversión con respecto al año anterior, ya que los 30 lotes previstos en la comunidad autónoma tienen un presupuesto base de algo más de 2,5 millones de euros, uno más que en 2020.
También aumenta la cantidad prevista para la provincia de Albacete, con cinco lotes que suman un coste previsto de 482.000 euros, unos 130.000 por encima de lo presupuestado en la campaña anterior. Esa inversión servirá para realizar los trabajos en 1.130 hectáreas, pertenecientes a 32 términos municipales, principalmente de las sierras de Alcaraz ySegura, aunque también se incluyen zonas de La Manchuela y las comarcas de Almansa y Hellín.
Las tareas consisten en la eliminación de restos forestales resultantes de la realización de diversos tratamientos selvícolas preventivos, así como los que generan en los aprovechamientos de esas zonas y el desbroce de montes. Su destrucción resulta necesaria ya que contribuyen a aumentar el riesgo de incendio, tanto en su probabilidad de origen como para facilitar su propagación
Tal y como explica la documentación publicada por Geacam, durante el periodo de prevención se llevan a cabo a cabo trabajos de eliminación de combustible, consistentes en la acumulación de residuos y quema en lugares aptos para ello y en condiciones climáticas favorables. Sin embargo, ese método no se usa en zonas especialmente vulnerables o las consideradas «delicadas» por su ubicación junto a carreteras, caminos rurales o áreas cortafuegos.
Es en esos espacios donde se opta por la contratación externa para la eliminación con métodos mecánicos, acordonando primeros los residuos y triturándolos después con desbrozadoras de cadenas o martillos acoplados a un tractor forestal. Además, se contempla el uso puntual de desbrozadoras manuales
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