Imaginar cómo será Villarrobledo dentro de 30 años para el primer edil en el Consistorio pasa por adaptarse a las transformación en una época de cambio de muchas de las percepciones de lo que ha sido hasta ahora los pilares de la economía.

Bueno pone como ejemplo los cambios más vistos en los telediarios de combustible por energía renovable en un nuevo marco del que Villarrobledo debe estar pendiente de los detalles y poner todo sus sentidos para saber transformarse, porque de ello dependerá que su proyecto pueda continuar en el tiempo.

La visión que el primer edil tiene de la ciudad dentro de 30 años es moderna , con gente llena de ilusión por un proyecto vital de ciudad con recursos, infraestructuras y trabajo para mantener en el tiempo, sin lastre no marcado por no tener calidad, como hicieron los mayores que dejaron un gran patrimonio para una ciudad puntera y referente en Castilla- La Mancha.

Valentín Bueno ve Villarrobledo en 30 años una urbe moderna

Villarrobledo, explica el regidor popular, sigue teniendo actualmente una situación complicada en cuanto al presupuesto municipal y desde hace 15 años no logra hacer efectivo ni un euro para nuevas infraestructuras aunque durante el último periodo de legislatura, según el alcalde, los ciudadanos están viendo nuevo alumbrado en las calles y las plazas y ambiciosos planes para arreglar los caminos del término municipal  y algunas calles de la ciudad que durante años han sido desatendidas.

Matiza, en este contexto, que son acciones que el equipo de Gobierno lleva a cabo sin perder el norte, ni poner en peligro las cuentas municipales que hay que cuidar, porque cree que a un alcalde los ciudadanos le recuerdan siempre por su gestión de Gobierno, y la deuda como lo que haga nunca es separable porque es como si de una familia se tratara. Si la familia no tiene ingresos es muy difícil que pueda cambiar el salón de sus casa o pintar paredes.

La parte más oscura o la que no se ve, según el alcalde de Villarrobledo, es la económica y como en cualquier familia es la que sostiene el bienestar de todos para disfrutar de una renta y en el caso del Ayuntamiento para, justamente, dar entrada y salida a infraestructuras y servicios de calidad a los vecinos.

Valentín Bueno señala que dentro de 30 años todos deberíamos haber demostrado el resultado de una lucha por defender el patrimonio de referencia que dejaron quienes nos precedieron, y afianzar el liderazgo de una ciudad puntera dentro del contexto de la región y España.

Una ciudad, continúa,  donde lo verde y lo sostenible tiene cabida con resultados reales y visibles que reivindican, a diario, un compromiso cívico para su mantenimiento por lo que aporta y aportará al bienestar de la sociedad, especialmente de los niños que lo disfrutan y que son realmente el futuro de Villarrobledo dentro de 30 años, y también el entorno con el que cuenta la sociedad actual y futura del municipio en su conjunto..