Las consecuencias del cambio climático son cada vez más evidentes y, poco a poco, desde diversos ámbitos se avanza hacia una conciencia ecológica y sostenible. La educación es fundamental en este sentido y, por ello, desde los colegios trabajan para que los niños adquieran prácticas saludables como la de reciclar.

Varias escuelas de la capital albacetense decidieron llevar el reciclaje a las aulas y colocaron contenedores de plástico para que los niños aprendan a distinguir entre los materiales que pueden tener un segundo uso y los que terminan siendo basura. Se trata de los centros educativos que forman parte del sistema de recogida semanal de envases que puso en marcha el Ayuntamiento de Albacete en el año 2012.

Pero no sólo en los colegios y en las escuelas infantiles existen estos contenedores amarillos, sino que el servicio se extiende hasta los institutos e, incluso, hasta los centros del campus universitario. En total, hay colocados en las instalaciones educativas de la capital albacetense un total de 71 contenedores de 770 litros y 61 de 360 litros.

Gracias a este servicio, durante el pasado año, se reciclaron 26.380 kilos de plástico, mientras que en el ejercicio anterior se contabilizaron 24.340 kilos de envases. Unas cantidades que han ido aumentando y que, en el actual ejercicio, se sitúan en 23.840 kilos, cuando faltan tres meses todavía para cerrar 2019, lo que hace prever que la cantidad total de envases reciclados en los colegios albacetenses a lo largo de este año superará la del ejercicio anterior. Se mantiene la tendencia positiva.

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