Martín Baeza-Rubio rinde tributo a Fernández Arbós

Emilio Martínez
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El maestro es el comisario de una exposición sobre un músico muy valorado en el extranjero

El director de orquesta almanseño Martín Baeza-Rubio. - Foto: Carlos Paverito

Es un hecho muy, demasiado español. Ése de que algunas de nuestras mejores tradiciones culturales, léase por ejemplo la zarzuela, o de nuestros grandes personajes tengan más cartel internacionalmente que aquí. Por fortuna para ellos a veces sale un Quijote que pelea contra  esos gigantes y esos molinos de viento tan demasiado nuestros. Así acontece con Enrique Fernández Arbós, uno de los más importantes y polifacéticos músicos, «que tantísimo hizo por la música española y sus intérpretes, siendo su orgulloso e inigualable embajador en el mundo», cual atestigua su Quijote particular. Pongamos que se habla/escribe de otro grande entre los grandes, amén de igualmente emisario de nuestro país desde, entre otros, su actual puesto como director titular de la Berlín Opera Chamber Orchestra  y de la Kammerensemble Modern Deutsche Oper Berlín: del almanseño Martín Baeza-Rubio.

Este paladín justiciero, cargado de argumentos y datos irrebatibles con su ídolo, lleva dos décadas en su intento de subir a los altares mediáticos a un músico, sí muy valorado entre sus colegas, aunque tampoco lo suficiente. Porque Martín -también un excepcional trompetista de clásico con multitud de grabaciones y actuaciones- tardó tres lustros largos, cargados de visitas a familiares de Arbós y archivos españoles y extranjeros para documentarse, en redactar su doctorado sobre el mismo, al que se calificó con un sobresaliente cum laude en la Universidad Autónoma de Madrid hace cuatro años. A partir de entonces ha seguido divulgando, no sólo en España, sino en Alemania, donde vive, y en otros países, su figura. 

Pero la guinda, prevista para 2020 y que hubo que aplazar este año por la pandemia que no cesa, ha llegado ahora: con una tan magnífica como didáctica exposición en 16 paneles de extraordinario diseño y muy fáciles de leer en ese templo nacional de la cultura que es la madrileña Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Una exposición para la que ha contado con varias ayudas que no quiere olvidar: «Tanto la Fundación Arbós (presentada al público el 27 de junio de 2018 en la propia RABASF), como la Orquesta Sinfónica de Madrid (hoy orquesta titular del Teatro Real), de la que el Maestro Arbós fue su director titular durante 35 años (1904-1939), siendo la titularidad más larga de un titular en una orquesta española».

La muestra, que está siendo muy visitada y se podrá seguir haciendo hasta el 31 de julio próximo, se inauguró el pasado día 20 con una también didáctica conferencia del almanseño sobre vida, obra y proyección internacional de Arbós. La idea de la exposición en Madrid surgió después de la realizada en la Embajada de España en Alemania, en mayo de 2019, con el título de Maestro Arbós. Música y Vanguardia. «Estoy feliz de que por fin se haya podido presentar en Madrid y máxime en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (Rabasf), de la cual el Maestro Arbós fue Académico desde 1924».

Esta muestra y conferencia no será la única, ya que hay varias  otras previstas en la Rabasf en distintos días, mientras dure la exposición del Maestro Arbós, que será hasta el próximo 31 de julio de 2021. Eso en nuestro país, pero también, con Martín como máximo responsable, organizador y comisario, se llevarán a cabo en otras instituciones de Bélgica, Alemania, Reino Unido, Rusia y Estados Unidos, y que serán anunciadas en un futuro. Algo similar llevó a cabo este excepcional músico de relieve mundial en su querida Almansa –de la que tanto ejerce y presume- dentro de los 21 eventos que se realizaron en el V Festival Internacional de Música de Almansa, en 2017.

Embajador de España. El denominador común de todas ellas es el mismo: subir a los altares laicos de la música a una figura de tal trascendencia y tan fundamental, del que insiste que es mucho más conocido fuera de nuestras fronteras que en nuestro país: «No es justo que una personalidad tan importante, que tantísimo hizo por los músicos españoles y la música española, que fue embajador de la música de España en el mundo, dirigiéndola por todas partes infinidad de veces y de la del mundo en España -habiendo dirigido 445 obras importantísimas de la historia de la música por primera vez en nuestro país-, educador y figura indiscutible en la historia musical, sea todavía tan desconocido en su propia nación». 

Con el trabajo y la pasión que luce el almanseño es más que factible que poco a poco vaya logrando esta su justa y necesaria obsesión, sólo comparable por la que tiene de su tierra: “Así es, presumo de mi tierra donde estoy y donde voy”. Le hace gracia lo de que en su lucha se le compare con otro de sus personajes favoritos, en este caso literario y de ficción: El Ingenioso Hidalgo. Aunque no por ello se olvide de Sancho Panza.

Es más, cree que los manchegos en general y él en particular tenemos algo de los dos personajes inventados por Cervantes, a los que en su opinión nos parecemos «dependiendo del día y la hora». «Representan el sueño de cambiar el mundo a mejor y más justo y la realidad misma de lo que se puede cambiar ahora, lo que podremos cambiar mañana y lo que tendremos que esperar algo más para poder cambiar». Y, para cerrar el asunto, utiliza otra comparación: «Es como preguntar si quieres más a tu padre o a tu madre. La contestación es la misma, depende de la hora y del día».

Como es lógico, la frenética actividad profesional, a la par que vocacional, del almanseño residente en Berlín, también de gran relevancia internacional, no se acaba en Fernández Arbós. Por ello, antes de concluir este reportaje sobre su figura -cuya fabulosa trayectoria necesitaría de varias páginas y es mejor verla en su página web martinbaezarubio.com- es menester cuestionarle por los más inmediatos proyectos, ya exclusivamente volcados en la dirección de sus formaciones, la Berlín Opera Chamber Orchestra  y la Kammerensemble Modern Deutsche Oper Berlín orquesta, y en otras muchas como invitado.

Muchos de esos compromisos vienen de atrás, ya que debido a la pandemia –«que nos ha obligado a reinventarnos todos», sostiene- varios de ellos se aplazaron, aunque «con la ventaja de que han aumentado las grabaciones, que no necesitan público». De modo que tras el reciente proyecto que acaba de concluir en Viena  y seguir pendiente de los fastos respecto a Arbós, lo más inmediato son dos grabaciones más de CD’s en las próximas fechas. Luego dirigirá la Münchner Symphoniker en una de ellas dentro de sólo unos días, a principios de junio, y a la Berliner Symphoniker en la otra, unas fechas más adelante. Luego vendrán muchos otros compromisos que resume así:«Seguir trabajando, avanzando y aprendiendo».