Miles de chinos marchan en favor de la ley de extradición

Europa Press
-

Los partidarios de la propuesta respaldan la labor de las fuerzas policiales y no consideran que sea una amenaza la entrega de los arrestados a la China occidental

Miles de chinos marchan en favor de la ley de extradición - Foto: TYRONE SIU

Los partidarios de la polémica ley de extradición a China se han concentrado este domingo frente a la sede de la Policía de Hong Kong en favor de la propuesta, que a principios de mes motivó una de las mayores manifestaciones de la historia del territorio contra el Gobierno de Pekín. 

Esta contraprotesta también ha servido para respaldar la labor de las fuerzas policiales durante la dispersión de las manifestaciones, duramente criticada por organizaciones civiles de la ciudad, por su inusual violencia. A la concentración de este domingo se han sumado defensores de la jefa ejecutiva del territorio, Carrie Lam, así como familiares de los agentes que participaron en las labores de contención de las manifestaciones, en particular la del 12 de junio. 

La propuesta de ley planteaba la posibilidad de extraditar a China a algunos detenidos en Hong Kong, en lo que sus detractores consideraban una posible amenaza para la seguridad de los arrestados, dada la precaria situación de los Derechos Humanos en el gigante asiático. 

Se da la circunstancia de que este lunes los manifestantes contra la propuesta de ley volverán a salir a la calle en masa con motivo de la conmemoración del aniversario de la entrega del territorio a China por las autoridades británicas en 1997. 

Las autoridades de Hong Kong han llamado a la calma ante cualquier posible incidente que pudiera ocurrir a través del secretario jefe del territorio y número dos del Gobierno, Matthew Cheung. "Es imperativo que restauremos el orden social y la tranquilidad tan pronto como sea posible, estabilizar el entorno empresarial y devolver a Hong Kong al buen camino", ha escrito en su blog oficial. 

Carrie Lam no ha aparecido en público desde el 18 de junio, el día que paralizó el debate sobre la ley y pidió perdón por la actuación policial, aunque no dimitió como pedían los manifestantes.