La derrota del Albacete ante el Granada ha dejado a los manchegos sin prácticamente opciones de ascender de manera directa a Primera División, ya que al cuadro nazarí sólo le falta un triunfo para ser equipo de Primera  o que los blancos no ganen el sábado en El Molinón al Sporting. Por ello, después del varapalo, al equipo de Luis Miguel Ramis le toca levantarse e ir a por el siguiente objetivo, que no es otro que amarrar la tercera plaza que ahora ocupa.
No será tarea fácil porque la jornada ha dejado al Mallorca en cuarta posición pisándole los talones al Alba, con un solo punto de ventaja, lo que obliga al Albacete a ganar en Asturias para mantenerse terceros, ya que un empate en El Molinón y una victoria del Mallorca en el campo del Deportivo -juegan el lunes-, le daría el tercer puesto a los baleares.
Ser terceros garantiza jugar la vuelta de las dos eliminatorias en casa y además, en caso de empate y tras disputarse la prórroga, si el empate persistiese, se clasificaría el mejor clasificado, una ventaja más de ser tercero.

(Más información en la edición impresa)