Una pieza separada de la Operación Oikos, cuyo secreto de sumario levantó el juez hace 24 horas, investiga una posible "trama de corrupción que envolvería a Luis Rubiales", presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), por la concesión de una subvención al campo del Huesca.
Según informó el diario Marca, el sumario se refiere a la "presunta adjudicación injusta de la construcción de un campo para la SD Huesca concedida" por la RFEF al equipo oscense, condicionada a la elaboración de un libro por el consejero delegado del club, José Antonio Martín Petón, sobre la selección española.
El sumario reproduce una conversación entre José Antonio Martín Petón y Agustín Lasasosa, consejero delegado y presidente del Huesca, respectivamente, en la que hablan de la construcción de dicho campo concretada ya con Rubiales.
"La trama de corrupción envolvería tanto a Petón como a Lasaosa y Luis Rubiales, siendo parte necesaria en todo el entramado Óscar Fle, presidente de la territorial de Aragón, (aunque por lo que se aprecia en las conversaciones, es ajeno a toda negociación anterior entre Petón y Rubiales)", señala el documento. También indica que "hace pensar que la RFEF va a tener un trato preferente con la SD Huesca para la construcción o remodelación de unos campos de fútbol que el club oscense tiene en el instituto de Educación Secundaria Las Pirámides.
Amaños internacionales
Tras el levantamiento del sumario, el diario Marca informó de que el exjugador Carlos Aranda, uno de los presuntamente implicados en el caso que investiga amaños en el fútbol profesional, intentó arreglar partidos del equipo Frosinone de la Serie A italiana.
Según el periódico, la transcripción de una conversación grabada entre Carlos Aranda y Mattia Mariotti, ciudadano italiano al que la investigación coloca al mismo nivel que a Íñigo López, es decir, intermediario. Mariotti, dice el sumario, "consulta a Aranda qué es lo que tiene que ofrecer a los jugadores (resultado o goles) para predeterminar el resultado del partido, apreciándose una actitud sumisa a los designios de Carlos Aranda". Durante la conversación, Mariotti le explica a Aranda que conoce a una persona a la que llama "mi amigo de pelo largo" y que regentaría una casa de apuestas ilegal que tendría como cliente habitual a Ciro Immobile. "Immobile, de la Lazio, juega con él también, es su cliente el delantero", dice el italiano a Carlos Aranda. Además, esa persona tendría relación con el delegado y varios jugadores del Frosinone, que serían objeto de corrupción por la trama.
Para terminar, el transalpino, con domicilio en Málaga, habla con Aranda sobre sus traslados de dinero entre la ciudad andaluza y Roma, llegando a transportar en la maleta 90.000 euros.